Las cifras de la pandemia en Brasil son catastróficas: ha llegado a tener casi 30,000 contagios por día y se ha convertido en el segundo país con más casos en el mundo. En medio de todo, Jair Bolsonaro es investigado porque se le acusa de interferir en la Policía Federal, la brutalidad policial se ha disparado y se agrava la deforestación en la Amazonía. Esta semana, las periodistas brasileñas Carol Pires y Manuela Andreoni nos ayudan a entender la doble crisis que vive el país más grande de América Latina.
Las cifras de la pandemia en Brasil son catastróficas: ha llegado a tener casi 30,000 contagios por día y se ha convertido en el segundo país con más casos en el mundo. En medio de todo, Jair Bolsonaro es investigado porque se le acusa de interferir en la Policía Federal, la brutalidad policial se ha disparado y se agrava la deforestación en la Amazonía. Esta semana, las periodistas brasileñas Carol Pires y Manuela Andreoni nos ayudan a entender la doble crisis que vive el país más grande de América Latina.
Créditos:
-
Producción
Silvia Viñas, Álvaro Céspedes -
Edición
Daniel Alarcón, Eliezer Budasoff -
Verificación de datos
Andrea López-Cruzado -
Diseño de sonido
Elías González -
Pasante de producción
Inés Rénique -
Fotografía
Erik Dias
Etiquetas:
Transcripciones:
Transcripción:
Eliezer: Bienvenidos a El hilo, un podcast de Radio Ambulante Estudios. Soy Eliezer Budasoff.
Silvia: Y yo soy Silvia Viñas.
La tendencia de las últimas semanas ya está clara, Latinoamérica es el epicentro de la pandemia global. Y dentro de la región, el país con más contagiados y más muertos, es Brasil.
Eliezer: Pero el nuevo coronavirus no es la única crisis que enfrenta el país más grande de América Latina.
Hoy, Jair Bolsonaro, entre el escándalo político y el desastre sanitario.
Es 5 de junio, 2020.
Eliezer: Carol, ¿cuál crees que ha sido hasta el momento como la mayor crisis política del gobierno de Bolsonaro?
Carol Pires: El Gobierno de Bolsonaro es una crisis política, ¿no? Su elección ha sido resultado de una crisis política y él mismo es la crisis política.
Eliezer: Ella es Carol Pires.
Carol: Soy periodista y guionista.
Eliezer: Carol ha sido reportera política en Brasil durante años. Escribe artículos de opinión para The New York Times y colaboró en el guión del documental “Al filo de la democracia”, que fue nominado al Oscar. Y, desde el año pasado, ha estado investigando la vida de Bolsonaro para un proyecto periodístico.
Carol: Estamos en un momento de hecatombe política, con una pandemia, entonces no sé cómo podría quedar peor.
Eliezer: Jair Bolsonaro llegó a la presidencia de Brasil después de ganar unas elecciones muy polarizadas y violentas en 2018. Es un militar retirado, con una larga carrera política. Fue diputado por casi 30 años.
Carol: Pero era un diputado que lo llamábamos folclórico. Era como el único que defendía abiertamente la dictadura militar. Siempre estaba involucrado en situaciones absurdas.
Eliezer: Es decir, su reputación como político se construía a partir de los escándalos que generaba.
Carol: Por ejemplo, como cuando dijo a una diputada del Partido de los Trabajadores que no la iba a violar porque ella no lo merecía, porque era fea. O entonces, porque en una entrevista llamaba a los periodistas estúpidos o mentirosos.
Una vez, en los años 90, dijo que el presidente Fernando Henrique debería ser fusilado.
Carol: Y que el error de la dictadura había sido no haber matado 30 mil personas más. Si hubiera matado inocentes, c’est la vie. Es como… es lo que pasa. Y dijo algo muy parecido ahora, con la pandemia, era como que se va a morir gente pero lo que pasa es la vida y vamos en enfrente.
Carol: Entonces tiene como un desprecio, ¿no? por, por el otro, no siendo uno de ellos, que se jodan .
Eliezer: ¿Y cómo era la situación política antes de la pandemia y su relación con sus ministros?
Carol: Eh, mira, Bolsonaro es el tipo de, de político, de presidente, que entiende apoyo como sumisión. Entonces armó su equipo ministerial. Pero a lo largo de su gobierno, estamos en un año y medio de gobierno de Bolsonaro, ha echado a varios ministros que de principio eran sus manos derechas.
Eliezer: Primero, al mes y medio de empezar su mandato, a su secretario general de la presidencia, Gustavo Bebianno, que además fue el presidente de su partido.
Carol: Hizo toda su campaña, lo echó.
Eliezer: Luego, menos de dos meses después, a su ministro de educación.
Carol: Que era un completo lunático.
Eliezer: Un tipo que decía que la educación en Brasil era un adoctrinamiento de la ideología marxista y que consideraba “nociva” la educación de género.
Carol: Eso pensábamos hasta que nombró al nuevo ministro de Educación, que es algo peor. Bolsonaro tiene una mentalidad de cerco. Está todo el tiempo preocupado con enemigos internos.
Eliezer: Carol dice que ha sido así desde siempre. Recordemos que Bolsonaro es un militar retirado. Estaba en el ejército durante la dictadura.
Carol: Estaba luchando en contra de enemigos internos, en contra de la guerrilla. Para mí eso está como muy entrañado en la personalidad de Bolsonaro porque siempre está apuntando a enemigos internos, gente que puede estar infiltrada en su equipo, gente que pretende ser su aliado pero en verdad lo va a apuñalar en cualquier momento.
Eliezer: Y es precisamente esta tendencia, a ver enemigos en todos lados y proteger lo suyo por encima de todo, que está al centro de la crisis actual. Y no hay nadie a quien proteja más que a sus hijos. Tiene cinco.
Carol: Dos son pequeños: uno está en la universidad, una es pequeña. Y tres son políticos. Entonces el más grande es el senador Flavio Bolsonaro. El segundo se llama Carlos, es concejal en Río, y es su hijo favorito, es el más próximo de él. Tienen una química, una conexión muy fuerte. Y el más, más chico es diputado, se llama Eduardo Bolsonaro. Entonces son tres personajes muy influyentes en el gobierno y en general las crisis siempre están involucrados con uno de ellos.
Eliezer: La primera crisis comenzó incluso antes de que Bolsonaro tomara posesión.
Carol: Fue porque el más grande, Flavio, empezó a ser investigado por corrupción en Río. Entonces ya entramos al gobierno con esa crisis del hijo que tenía un esquema de corrupción en su gabinete y todo eso.
Eliezer: Pero vayamos al favorito: Carlos.
Carol: Es como el líder de la guerra cultural del Gobierno.
Eliezer: Tal vez se acuerdan de esto, del año pasado:
Audio de archivo, periodista: El presidente brasileño compartió un clip en Twitter de las celebraciones del carnaval de este año, donde un hombre orina sobre la cabeza de otro.
Periodista leyendo tweet: No me siento cómodo mostrando esto, pero tenemos que exponer la verdad para que la población tenga conocimiento y decida sus prioridades. ¿Es esto en lo que se han convertido las calles del carnaval brasileño? Comenten y saquen sus propias conclusiones.
Carol: Y después preguntaba, ¿qué es el golden shower? Y todo eso no había sido Bolsonaro, fue Carlos. Carlos maneja toda su cuenta en Twitter, en Facebook. Toda su campaña digital. Entonces uno nunca sabe cuándo es Bolsonaro y cuándo es Carlos. Pero al fin Bolsonaro es antes padre que presidente, entonces siempre está al lado de su hijo. Entonces, cada vez que hubo un confronto entre Carlos y alguien, salió ese alguien.
Eliezer: Y esto es importante para entender este momento de Brasil, porque los tres hijos mayores de Bolsonaro están bajo investigación por distintas razones. A Flavio Bolsonaro lo están investigado por lavado de dinero y malversación de fondos públicos en Río. Y la policía federal identificó a Carlos como uno de los cabecillas de una organización criminal que difunde noticias falsas. Según Folha do Sao Paulo, uno de los periódicos más grandes de Brasil, su hermano Eduardo también está siendo investigado por pertenecer a este grupo.
Audio de archivo, noticiero: La situación sanitaria en Brasil por el nuevo coronavirus se suma a la crisis política interna en el gobierno de Jair Bolsonaro.
Audio de archivo, noticiero: Dimite el Ministro de Justicia de Brasil Sergio Moro por las injerencias del presidente Jair Bolsonaro en la policía federal.
Audio de archivo, noticiero: El ex juez Moro, quien elevó de manera significativa, hay que recordarlo, su perfil público al ponerse al frente de la mayor causa de corrupción de Brasil, conocida como todos sabemos como la operación Lava Jato.
Eliezer: ¿Cómo entra la figura de Sergio Moro al gobierno de Bolsonaro y por qué se pelean?
Carol: El fenómeno Moro precede el fenómeno Bolsonaro.
Eliezer: Sergio Moro fue la imagen visible de la gigantesca operación anticorrupción que en 2014 desató la ilusión de que se podía acabar con la impunidad, pero también un descrédito contra toda la clase política. Fue el juez que condenó a prisión al expresidente Lula da Silva en 2017.
Carol: Y yo diría que Moro logró, encima de todo, como crear la sensación de que la impunidad ya no era una regla. Entonces la gente estaba como muy feliz de que por fin alguien estaba luchando en contra de la corrupción efectivamente.
Eliezer: Pero también se ha cuestionado la ética e imparcialidad de Moro como juez. Se lo ha acusado de dañar en exceso al gobierno del Partido de los Trabajadores para mantener su imagen de justiciero.
Carol: Al fin, lo que creó fue como una gran sensación de que la política es una gran mierda, los políticos son todos iguales, son todos corruptos. Entonces creció mucho una… el sentimiento antipolítica, ¿no? Toda esa energía antipolítica fue capturada por la campaña Bolsonarista.
Eliezer: Un día después de ganar las elecciones en 2018, Bolsonaro anunció que nombraría a Moro como su Ministro de Justicia. Y Moro aceptó.
Carol: Y entonces Moro entra al gobierno llevando consigo todo su apoyo, todo su prestigio. De una manera legitimó el gobierno de Bolsonaro, ¿no? El problema es que nunca fueron de verdad aliados. Y como te decía, Bolsonaro es ese tipo que entiende apoyo como sumisión.
Eliezer: Tuvieron varios desencuentros. Uno de ellos, sobre cuánto flexibilizar la tenencia de armas. O, también, cuando Moro quiso contratar a una cientista política de centro izquierda como asesora, Bolsonaro lo obligó a retirar la invitación. Y luego, también esto:
Carol: Su proyecto como ministro de Justicia, era aprobar como un paquete de proyectos que llamaban pacote anticorrupção.
Eliezer: Un paquete de medidas para combatir la corrupción, el crimen organizado y la violencia. El proyecto finalmente fue aprobado en el Congreso, pero Bolsonaro vetó 25 artículos.
Carol: Entonces Moro cada vez era más humillado, ¿no? Pero seguía ahí porque tenía la promesa de que Bolsonaro en algún momento le iba a nombrar ministro de la Suprema Corte. Entonces, que sería, ¿no? un cargo vitalicio de lo más importante para un magistrado como Moro.
Eliezer: Moro era muy cercano al director de la policía federal, Maurício Valeixo. Él lo había nombrado. Pero Bolsonaro quería cambiarlo. A él y también al director de la policía federal en Río.
Carol: Y Moro sabía que eso era para proteger a su familia. Entonces, creo que Moro cuando percibió que Bolsonaro iba a nombrar el director que él quería, Moro por fin sale del gobierno, y es cuando da la conferencia de prensa…
Audio de conferencia: “Desgraciadamente no puedo seguir en mis funciones sin las condiciones de trabajo para poder asegurar la autonomía de la policía federal”, declaró.
Carol: Diciendo que Bolsonaro quería interferir en la Policía Federal, que él no estaba de acuerdo, por eso estaba saliendo.
Eliezer: El Tribunal Supremo abrió una investigación sobre esta supuesta interferencia de Bolsonaro, y a principios de mayo interrogaron a Moro durante 8 horas.
Carol: Y ahí es cuando Moro dice que Bolsonaro incluso lo amenazó públicamente enfrente de otros ministros, de que si no cambiaba el director de la Policía Federal iba a cambiar el ministro.
Eliezer: Y Moro también dice que sus denuncias se pueden comprobar por una reunión ministerial.
Carol: Una reunión entre todos los ministros con Bolsonaro, que suele ser una reunión de organización del Gobierno. Esa reunión donde él lo amenazó estaba grabada.
Audio de archivo, noticiero: El tribunal supremo aprobó la publicación del video de una reunión ministerial del pasado 22 de abril, en el que un alterado Jair Bolsonaro pronunció la frase que, como ya denunció el antiguo juez Sergio Moro al dimitir, demostraría injerencias del presidente en la cúpula policial.
Traductor: Intenté cambiar nuestra seguridad en Río de Janeiro y no pude. Se acabó. No voy a esperar a que jodan a toda mi familia o a un amigo, lo voy a cambiar. Si no puedo cambiarlo, cambiaré a su jefe, y si no puedo cambiar a su jefe cambiaré al ministro.
Eliezer: La publicación de este video, que era una manera de comprobar lo que había dicho Moro, desató un nuevo escándalo. Y no solo por lo que dijo Bolsonaro. Es una reunión donde están todos los ministros, dura más de 2 horas, y fue en plena pandemia.
Carol: Aquí ya teníamos dos mil muertos en ese momento, con una subnotificación enorme, ¿no? porque ni todos los muertos están siendo testados. Pero ya sabíamos en aquel momento que sería una situación difícil.
Eliezer: Le pedí a Carol repasar algunas de las cosas que dijeron los ministros en esa reunión.
Carol: El ministro de Educación en un momento dice que los ministros de la Suprema Corte deberían ir a la cárcel.
Están todos como eh, de verdad, muy enojados porque los gobernadores, los ministros de la Suprema Corte, están en favor de que Brasil decrete una cuarentena y que todos se queden en casa hasta que pase todo eso.
Eliezer: La ministra de Derechos Humanos en otro momento dice que la izquierda quiere aprovechar la pandemia para legalizar el aborto.
Carol: Hay un momento muy, muy pesado en que el ministro de Economía defiende que privaticen el Banco do Brasil que es el mayor banco público aquí.
Y dice también una cosa muy, muy fea de que deben usar el dinero público para salvar a las grandes empresas y que las pequeñas no vale la pena porque sería perder plata.
Hay otro momento, también muy pesado, en que el ministro de Medio Ambiente dice a Bolsonaro que ellos deberían aprovechar, que la gente está distraída por la pandemia para que pasaran todo tipo de, de decretos flexibilizando las leyes de protección ambiental.
El ministro de Educación también en un momento dice algo como que de la nada empieza a decir: odio la expresión pueblos indígenas, odio, lo odio.
Y esa es como el alma o el corazón y la meta del Bolsonarismo. Ellos entienden que sólo hay un tipo de cosmovisión, un tipo de vivir. Es como una, una visión muy, muy… ¿cómo te digo? es muy fascista, ¿no?
Eliezer: Le pregunté a Carol si a ella —que ha estado cubriendo la política brasileña durante años, que está investigando sobre la vida de Bolsonaro— le había sorprendido este video.
Carol: Lo que puedo decir es que estoy un poco anestesiada y deprimida. O sea, entonces cuando, cuando sale a la luz una, una reunión así no me sorprende, porque son lo que son. Son lo que siempre han sido. Nadie pensó que eran personas distintas. Incluso son así públicamente. Lo que nadie sabía era que cuando están reunidos para trabajar no trabajan y siguen siendo quienes son públicamente.
Eliezer: ¿Cuáles pueden ser sus impactos políticos y simbólicos?, digamos.
Carol: El video tendrá como implicaciones jurídicas, posiblemente porque, como te decía, la Fiscalía ha pedido que todo lo que dijo todo lo que dijo Moro sea investigado, entonces Bolsonaro puede terminar investigado por crímenes de responsabilidad, por obstrucción de justicia.
Eliezer: Y no es el único bajo investigación. El ministro de Educación, Abraham Weintraub, fue llamado a declarar en medio de una investigación por ofensas a la Corte Suprema por lo que dijo en esa reunión, y por el mismo caso de noticias falsas en el que está involucrado Carlos Bolsonaro. El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, está siendo investigado por enriquecimiento ilícito.
Carol: Para mí lo más preocupante es que sigue después del video, después de la pandemia, después de todo, sigue teniendo un apoyo popular importante hasta lo suficiente, creo, que para detener un proceso de impeachment.
Eliezer: Ahora hay más de 500 pedidos de impeachment contra Bolsonaro y 35 de ellos ya habrían sido recibidos por el Congreso. Según una encuesta reciente, el rechazo a Bolsonaro llegó al 43%, que es un récord en su mandato. Pero sigue conservando alrededor del 30% de apoyo de un núcleo de seguidores que parece inamovible.
Carol: Creo que son gente de corazón Bolsonarista. Piensan como piensa Bolsonaro. Están de acuerdo con todo lo que dice Bolsonaro. Antes decíamos que la derecha, la extrema derecha, salió del armario. Ellos no van a volver al armario. Ahora que tienen un presidente de la República que confirma sus convicciones, se sienten empoderados, ¿no?
Eliezer: Ya volvemos.
Daniel Alarcón: Hola, soy Daniel Alarcón, director editorial de El hilo. También trabajo como productor ejecutivo de Radio Ambulante, un podcast en español donde contamos historias verdaderas que retratan la diversidad y riqueza de América Latina y Estados Unidos.
Estamos preparando una nueva temporada, pero mientras tanto pueden escuchar nuestro catálogo de más de 160 historias. Hay de todo: historias de familia, de fútbol, de amor, de política… Son historias que te enganchan y te conectan con nuestra región.
Suscríbete a Radio Ambulante cualquier aplicación de podcasts que usas y visita radioambulante.org para más información.
Laura Rojas Aponte: ¿Conoces a alguien que podría disfrutar de este podcast, pero aún está aprendiendo español? Recomiéndale Lupa.
Lupa es una app que usa episodios del podcast Radio Ambulante para ayudar a estudiantes de nivel intermedio a alcanzar la fluidez. En Lupa puedes ajustar la velocidad del audio mientras lees la transcripción, y guardar nuevas palabras en tu propia lista de vocabulario. Y si te tienes que apoyarte en la traducción al inglés, también está disponible.
Con Lupa, aprendes español mientras escuchas historias reales de toda América Latina. Visita lupa.app para saber más. L-u-p-a punto a-p-p
Manuela Andreoni: La grande ausencia en, en el video, de una reunión de todos los ministros del gobierno de Brasil, cuando hay miles de muertos, es… los muertos, la pandemia. ¿Qué hacer? ¿Cómo proteger la población de Brasil? No se habla de eso.
Silvia: Ya estamos de vuelta en El hilo. Y ella es Manuela Andreoni, una periodista freelance en Río de Janeiro. Colabora con medios como el New York Times y Foreign Policy. Y hablamos con ella para entender mejor la otra crisis que vive Brasil.
Audio de archivo, noticiero: Brasil, epicentro de la pandemia en Latinoamérica, es, tras superar a Rusia, el segundo país con más contagios en el mundo detrás de Estados Unidos.
Audio de archivo, noticiero: En el cementerio público Parque Taruma, se abren fosas comunes para enterrar a víctimas de COVID-19.
Audio de archivo, noticiero: Esta enfermedad no se anda con bromas, el que piense que es una broma va a perder la vida.
Silvia: ¿Brasil estaba preparado para enfrentar algo como esto?
Manuela: Como todos los países del mundo, no. Porque la pandemia sorprendió a todos. Pero si comparas con otros países en desarrollo, Brasil sí estaba más preparado que otros.
Silvia: Su infraestructura de salud es más robusta que la de sus países vecinos.
Manuela: Porque Brasil tiene uno de los sistemas de salud más complejos del mundo. Es un sistema totalmente gratis y amplio, universal como, como lo decimos, en que toda la población tiene acceso a todo tipo de procedimientos de salud.
Cuando empezó la pandemia, yo hablé con el ex ministro de Salud José Gomes Temporão, que fue el ministro de salud del gobierno de Lula. Él dijo, mira, nosotros no vamos a tener camas para todos, pero nuestro sistema de vigilancia en salud es bueno y tiene experiencia para conocer bien la pandemia y saber qué está pasando, hacer un diagnóstico bueno para nosotros podemos enfocar en lo que nosotros necesitamos. Y lo que vimos es totalmente lo contrario.
Silvia: Brasil tiene experiencia con brotes de enfermedades infecciosas y con epidemias.
Manuela: Por ejemplo, en el VIH tuvimos una política que fue un ejemplo para muchos países del mundo porque se rompieron las patentes de los medicamentos. Hicieron un programa para fortalecer el tratamiento gratis para toda la gente que tenía eso. Hicieron una vigilancia epidemiológica muy buena, que los casos disminuyeron bastante.
Silvia: O sea, que tienen experiencia haciendo rastreo para saber quién está infectado. También han aprendido de su experiencia combatiendo el dengue.
Manuela: De hacer hospitales de campaña rápido para que la gente se pueda tratar.
Silvia: Y el zika.
Manuela: Nosotros descubrimos muchas cosas sobre el zika, para poder responder a eso. Entonces teníamos experiencia y más que eso tenemos gente, tenemos recursos humanos que saben lo que, lo que se debe hacer. Esta gente fue ignorada y fue sacada de su, de su trabajo.
Silvia: ¿Qué se sabe sobre la preparación específica que se hizo para esta pandemia?
Manuela: Ellos decretaron emergencia bastante temprano. En el inicio siempre hicieron boletines epidemiológicos. Intentaron hacer lo que debía ser hecho, como cerrar las tiendas y todo antes. Pero hubo una presión muy grande de la presidencia para que no lo hiciesen.
Silvia: El 13 de marzo, antes de que se confirmara la primera muerte por el nuevo coronavirus, el Ministerio de Salud recomendó que no se hicieran eventos masivos, ordenó que se cancelaran cruceros, y pidió que las personas que llegaban del extranjero se aislaran por una semana. Pero menos de 24 horas después, el ministerio relajó sus propias medidas. Y según una investigación de Reuters, fue porque intervino la oficina del jefe de gabinete de Bolsonaro.
Audio de archivo, noticiero: Jair Bolsonaro volvió a minimizar el impacto del nuevo coronavirus en Brasil y descalificó las medidas de prevención que se han tomado para prevenir la propagación de la enfermedad.
Manuela: Bolsonaro siempre despreció la crisis. Decía que era una “gripecita”.
Y cuando quedó claro que sería una cosa muy grande empezó la interferencia para no cerrar las cosas, no… recomendar el distanciamiento social y todas esas cosas.
Silvia: Pero en estados como Sao Paulo o Río de Janeiro, los gobernadores impusieron medidas de confinamiento, cerraron escuelas y locales comerciales.
Y esta disputa sobre cómo manejar la pandemia rápidamente se volvió una batalla abierta entre algunos gobiernos regionales y el gobierno federal. Especialmente sobre la coordinación y compra de equipos esenciales para combatir la pandemia, como respiradores.
Manuela: Entonces lo que ves es que los gobiernos locales empiezan a hacer demandas judiciales contra el Gobierno Nacional para pelear por equipos. Entonces tiene, por ejemplo un, un alcalde demandando al gobierno nacional para comprar los respiradores que necesitaba. Tiene un gobernador que hizo un esquema grandísimo que pasaban los respiradores por Etiopía, después por otro país, otro país, para que llegase ahí. Todo para también evitar al gobierno nacional.
Silvia: Esta pelea escaló hasta la Corte Suprema, que ha apoyado que los gobiernos estatales decidan sus propias políticas para controlar la pandemia. ¿La respuesta de Bolsonaro? Se unió a una marcha para exigir el cierre de la Corte Suprema.
Y recordemos esta noticia de abril:
Audio de archivo, noticiero: El presidente Jair Bolsonaro destituyó el jueves a su ministro de salud debido a desavenencias en torno a las acciones del gobierno de Brasil para contener al coronavirus.
Silvia: Y luego, semanas después:
Audio de archivo, noticiero: Renunció el ministro de Salud de Brasil, menos de un mes después de asumir el cargo. Nelson Teich justificó su dimisión por incompatibilidades con el presidente Jair Bolsonaro en el combate contra el nuevo coronavirus.
Manuela: Entonces eso se ve que esa desorganización que vemos en la… no mencionar la pandemia en una reunión de ministros, en sacar los ministros, todo eso, eso sí se refleja directamente en la respuesta.
Silvia: Y todo esto ha tenido un impacto enorme. El crecimiento de la curva de contagios y de fallecidos en Brasil ha crecido de una manera sostenida, constante y rápida.
Manuela: Nuestra curva es más como una recta arriba no hay una curva. Está totalmente fuera del control.
Silvia: Ya hay más de medio millón de contagiados y más de 30,000 fallecidos. Más de una vez, la cifra de nuevos casos en un día ha bordeado los 30,000. Repito: en un día. Y hay datos que muestran que la tasa de mortalidad entre los indígenas es el doble que la del resto de la población. En Manaos, en la Amazonía, el sistema de salud ha colapsado. En otros lugares está a punto de colapsar. Hay desinformación y confusión. Y hay protestas en contra y a favor del gobierno y su manejo de la pandemia –en las que, por cierto, participa Bolsonaro–.
Pero esta doble crisis, política y sanitaria, no borra otras crisis con las que viene luchando Brasil. Manuela me habló de dos.
Recordemos la reunión del gabinete de Bolsonaro, y en particular lo que dijo el ministro del Medio Ambiente sobre aprovechar la pandemia para flexibilizar las protecciones ambientales. La autoridad estatal, responsable de cuidar el medio ambiente de la Amazonía, le dijo a Manuela.
Manuela: Los criminales no hacen cuarentena. Continúan a deforestar la Amazonía, continúan a hacer minería ilegal y todo eso. La Amazonía perdió 2 mil campos de fútbol por día, por día, en 2019. En abril aumentó, la deforestación aumentó como 60%. Entonces en julio y agosto, nosotros esperamos que los fuegos en la Amazonía van a ser históricos, peor que el año pasado.
Silvia: Y en las ciudades, la brutalidad policial también está aumentando. Manuela investigó la corrupción y extorsión detrás de un alza en el número de asesinatos por la policía en Río para un reportaje que publicó junto con el corresponsal del New York Times en Brasil.
Manuela: El año pasado fue récord, en Rio de Janeiro, de asesinatos por la Policía en toda la historia, con más de 1,800 personas muertas por la policía, en 2019, sólo en el estado de Rio de Janeiro. Casi todos son hombres negros.
Silvia: En abril, en plena pandemia, cuando las calles estaban más vacías por las recomendaciones de las autoridades, y el crimen en general disminuyó, ese número aumentó más del 40%. En total, entre enero y abril de este año, 606 personas murieron en operaciones policiales en el estado de Rio.
Silvia: Entonces, por qué Brasil, si tenía un sistema de salud pública bastante robusto, y experiencia con otras crisis médicas… ¿por qué Bolsonaro ha decidido manejar la pandemia así?
Manuela: Eso es una pregunta muy importante. Él sabe que va a ser muy difícil para su gobierno sobrevivir la recesión económica que ya está, ya empezó. Entonces él quiere que la culpa de eso no sea de él. Él quiere que la culpa sea de los gobernadores, de todo. Que él intentó todo lo que podía, hizo todos los esfuerzos para que la economía no sufriese.
Silvia: Pero también va más allá de lo económico, y tiene que ver con la visión de Bolsonaro y sus seguidores.
Manuela: Lo que Bolsonaro quiere hacer es deshacer todo ese proceso de 30 años de construcción democrática, de derechos sociales.
Silvia: Desde el fin de la dictadura militar, cuando una nueva constitución dio el derecho universal a la salud, a la educación, reconoció el derecho indígena por la tierra. Fue la base para que en los próximos 32 años se garantizaran más derechos.
Manuela: Entonces parece que quiere deshacer todo ese proceso. Como dijo el ministro de Medio Ambiente: quiere sacar todas las reglas y todo eso. Pero no, no sabemos exactamente lo que quieren poner en el lugar de las cosas que están destruyendo.
Silvia: Bueno, muchas gracias, Manuela.
Manuela: Muchas gracias a ustedes.
Silvia: Las protestas en Brasil no han parado, y el domingo en Sao Paulo una terminó en disturbios y represión. También, en Río, hubo protestas haciendo eco a las manifestaciones en Estados Unidos contra la brutalidad policial. Y en Brasilia, Bolsonaro se unió –a caballo– a una de las ya habituales manifestaciones convocadas por sus seguidores. Entre otras cosas, protestaban contra el Tribunal Supremo, que está investigando las acusaciones del exministro Moro contra el presidente.
En El hilo somos Daniel Alarcón, Álvaro Céspedes, Andrea López-Cruzado, Elías González, Inés Renique, Laura Rojas Aponte, Jorge Caraballo, Miranda Mazariegos y Carolina Guerrero. Nuestro tema musical lo compuso Pauchi Sasaki.
Gracias nuestro compañeros de Radio Ambulante por todo su apoyo y colaboración para sacar adelante este podcast.
El hilo es una producción de Radio Ambulante Estudios. Agradecemos de manera muy especial a los oyentes que nos han apoyado con sus contribuciones en nuestro programa de membresías. Sin ustedes, esto no sería posible.
Yo soy Silvia Viñas.
Eliezer: Y yo soy Eliezer Budasoff, gracias por escuchar.