Transcripción:

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Silvia: Bienvenidos a El hilo, un podcast de Radio Ambulante Estudios y VICE News. Soy Silvia Viñas. 

 

Eliezer Budasoff: Y yo soy Eliezer Budasoff.

 

Audio de archivo: El pájaro ha sido liberado, así tuiteaba Elon Musk después de hacerse con el control de la plataforma Twitter

 

Audio de archivo: El capricho le costó a Elon Musk 44 mil millones de dólares.

 

Audio de archivo: Su objetivo es, según él, contrarrestar la polarización política en los medios de comunicación tradicionales. 

 

Audio de archivo: Twitter había cancelado cuentas y mensajes de políticos como el ex presidente Trump por compartir información no confirmada o sin fundamento, algo que el propio empresario había criticado. 

 

Audio de archivo: Su objetivo, dice, no es ganar dinero, sino impulsar la libertad de expresión. Los críticos le reclaman un propósito más concreto para la plataforma.

 

Silvia: Si usan Twitter, es probable que hayan visto a muchos usuarios lamentando lo que pareciera ser el fin de esta red social. Algunos se despiden y en realidad se van; otros lo hacen de manera, digamos, preventiva, con miedo de que al otro día el Twitter que conocen y aman ya no esté. 

 

Eliezer: Y no es para menos, desde que Elon Musk compró Twitter, hay mucha incertidumbre sobre el futuro de una plataforma que –aún con sus problemas– para muchos ha sido una fuente de información, de oportunidades laborales y de conexión con el mundo.

 

Hoy, el hombre más rico del planeta compra la que podría considerarse la red social más influyente. Qué hay detrás de esta compra, y qué significa que la plaza pública digital esté bajo el control de Elon Musk. 

 

Es 25 de noviembre de 2022.

 

Silvia: Bueno, empecemos con la compra de Twitter. ¿Cuál era la situación de la red social antes de que llegara Elon Musk?

 

Mario: La verdad es que Twitter tenía una situación complicada desde hacía bastantes años. 

 

Silvia: El es Mario Escribano, periodista de Teknautas, la sección de Tecnología del diario El Confidencial de España. 

 

Mario: Es una empresa que además de los problemas que tenían el resto de redes sociales, ellos además tenían un problema adicional que es que eran un agujero negro de perder dinero. 

 

Silvia: Twitter reportó pérdidas de más de 200 millones de dólares para el año fiscal 2021. Y eso era una mejora, porque el año antes había perdido cinco veces eso.

 

Mario: Entonces, si tienes todos los problemas de mal moderación de contenidos, desinformación que tienen el resto de redes sociales, y si además eres una auténtica máquina de perder dinero y además usuarios, pues, tienes grandes problemas.

 

Silvia: Bajo este escenario de debacle, a finales de octubre Musk se convirtió finalmente en el dueño de Twitter. Y digo finalmente, porque dió muchas vueltas para llegar hasta aquí. Anunció que había hecho una oferta para comprar Twitter en abril. Luego, en mayo, paralizó el acuerdo. Twitter lo demandó para obligarlo a completarlo y estuvieron a punto de ir a juicio.

 

Silvia: Si tuvieras que resumir en pocas palabras cómo fue la  compra, ¿cómo la describirías?

 

Mario: Bueno, lo que quizá mucha gente no sabe es que esto empezó antes de que Musk anunciara por sorpresa que era el máximo accionista de Twitter. Empezó unos meses antes que empezó a comprar acciones de forma secreta. Y luego, ya una vez lo anunció, parecía que iba a ser todo como una compra más o menos pacífica, pero ha sido una sucesión de volantazos tras volantazos. Ni siquiera hizo las diligencias previas para inspeccionar la empresa. Entonces, bueno, incluso cuando se retiró de la compra, parecía un troleo porque los abogados de Twitter decían que no les comunicó nada, que había sido todo a través de Twitter lo que había dicho. Y luego, efectivamente, acabó comunicándolo al regulador que quería salirse. Ahí Twitter le demandó, él presentó una contrademanda y cuando estaban a punto de verse las caras en un juicio, él se acabó retirando y ya hemos llegado a esta situación. 

 

Silvia: A menos de dos semanas de ir a juicio, anunció que, finalmente, sí iba a comprar Twitter. Musk, el hombre más rico del mundo, desembolsó una cifra enorme para comprar la aplicación: 44.000 millones de dólares. 

 

Audio de archivo: Había llegado a la sede de Twitter cargando un lavabo de porcelana, quizás para instalar en el que será su nuevo trono el sonriente rey de los autos eléctricos Tesla y SpaceX con sus vuelos espaciales, ahora lo es también de la red social más cara. 

 

Mario: Su primera aparición allí, fue con este lavabo que hace referencia a un conocido meme de Internet. 

 

Silvia: Los memes pierden un poco la gracia cuando hay que explicarlos, entonces no lo vamos a intentar… Pero quizá llegar con un lavabo al trabajo es lo que pasa por humor entre los multimillonarios. Se le pueden dar varias interpretaciones, una es que estaría haciendo referencia al mal momento que atraviesa Twitter. Donde, además de los problemas de dinero que mencionamos antes, menos del 10% de los usuarios generan más del 90% de los tuits. Es decir, que la mayoría de los que usan esta red social, apenas tuitean. 

 

Aunque ese no es el caso de Musk. A quien se le considera un fanático, casi obsesivo, de Twitter. A la fecha, es la segunda persona con más seguidores, solo lo supera Obama.

 

Mario: Y sí, sí, él es un gran adicto a Twitter. De hecho, dice que aunque está muy ocupado, el uso de la plataforma lo hace siempre cuando va al baño. 

 

Silvia: Pero Mario no cree que esta sea razón suficiente para invertir tanto dinero en una empresa. 

 

Mario: Lo cierto es que ni siquiera su círculo más cercano, ni él mismo lo ha sabido explicar. Sí que tendría cierto sentido que un hombre tan poderoso quisiera la plataforma, la que es seguramente la plataforma más influyente del mundo, porque aunque tenga muchos menos usuarios que el resto, es ahí donde están políticos, periodistas, famosos e incluso se ha vuelto la nueva forma de establecer agenda en muchas ocasiones. Pero lo cierto es que los motivos, los motivos se le escapan un poco a todo el mundo.

 

Silvia: Y ahora que han pasado algunas semanas, ¿eso está más claro, o sea, ha dado algunas pistas sobre los planes que tiene para Twitter?

 

Mario: Diría que sus planes de Twitter son aún casi más difusos ahora, él daba algunas pinceladas de acabar con la publicidad, libertad de expresión, pero era todo muy vago.

 

Silvia: Musk ha dicho repetidas veces que su objetivo es convertir a Twitter en una especie de plaza digital del pueblo y sacarla de la supuesta censura en la que vive. 

 

Mario: Y bueno era tan vago como lo que se está viendo ahora que está improvisando completamente. Puso un tuit hace unos días en el que decía que Twitter iba a hacer muchas idioteces en los próximos meses, porque va a ir a hacer un ensayo de prueba y error en directo. Entonces, claro, quiere poner completamente patas arriba la plataforma. 

 

Silvia: También ha dicho que la compra de Twitter es una manera de acelerar la creación de X. Una aplicación para todo.

 

Mario: Es un modelo que funciona en China, por ejemplo, con la aplicación WeChat, que vale para absolutamente todo y lo que en otros países tenemos, como WhatsApp, Facebook, Uber, Amazon. Pues va todo en la misma aplicación. Y Musk en principio querría convertir Twitter, según ha dicho, en algo mucho más grande y como que Twitter fuera el corazón para que giraran otro tipo de servicios alrededor. 

 

Silvia: Es decir, que a través de X los usuarios pudieran mandar y recibir mensajes de texto o de video. O también obtener acceso a otras aplicaciones, como si fuera un sistema operativo móvil.  

 

Mario: Pero claro, eso en occidente por ahora nunca, nunca ha funcionado. Requiere una inversión aún mayor que ahora mismo no parece que Twitter se la pueda permitir y también es algo que plantea ciertas dudas de, por ejemplo, qué ocurre si hay algún fallo en esta aplicación. ¿Nos quedamos sin todos los servicios a la vez? Porque es algo que también tiene sus propios riesgos.

 

Silvia: Mario me dijo que Musk también plantea menguar la publicidad, que ahora representa el 90% de los ingresos de Twitter. Quiere bajar esa cifra a la mitad. La idea sería suplir el déficit con las suscripciones de pago a través de Twitter Blue, el servicio premium que permite editar tweets o acceder al famoso ícono azul de verificación. 

 

Hace poco, Musk implementó un cobro de 8 dólares para verificar tu cuenta y así obtener la marca azul — algo que, hasta entonces, solo te lo daban después de pasar por todo un proceso para demostrar que tu cuenta cumple con ciertos requisitos y que es de interés público. Pero este cambio generó caos. 

 

Mario: Provocó que hubiera suplantaciones de identidad que acabaron provocando, por ejemplo, que una farmacéutica perdiera 14 mil millones de cotización en bolsa.

 

Silvia: Una cuenta falsa – que obtuvo la marca azul pagando esos 8 dólares –  se hizo pasar por la farmacéutica Eli Lilly. Mandaron un tweet en el que anunciaban que la insulina sería gratis, lo que hizo que Eli Lilly cayera más de un 4% en la Bolsa. 

 

Mario: Justamente por no ser una medida que estuviera muy bien diseñada, han tenido que implantarla y luego quitarla varias veces porque ha sido un auténtico caos. 

 

Silvia: El apuro de Musk provocó que Twitter lanzara esta medida sin tener los filtros adecuados. Y fue así como la red social se llenó de impostores que tenían la marca azul. Por ejemplo, un supuesto George W. Bush dijo que y cito: “echo de menos matar Iraquíes”. Un Tony Blair falso, retuiteó a este Bush falso diciendo: “para ser honesto, yo también” Como estos hubo muchos otros tweets falsos, lo cual llevó a Twitter a suspender esta opción temporalmente.  

 

Pero este no ha sido el único escándalo en las últimas semanas… 

 

Mario: Los anunciantes están huyendo y sobre todo Twitter tiene muchísimos menos trabajadores que el día que apareció Musk con el lavabo. 

 

Audio de archivo, presentadora: y el dueño de Tesla se puso manos a la obra, inmediatamente, estrenó su adquisición despidiendo a un gran número de directivos. 

 

Audio de archivo, reportera: Anunció el despido, vía correo electrónico, de la mitad de sus empleados. 

 

Audio de archivo, presentador: El multimillonario explicó que ante las pérdidas millonarias de la empresa, no había otra opción más que reducir la fuerza laboral. 

 

Mario: Las primeras personas que despidió eran el consejero delegado Parag Agrawal y luego también el consejero general.

 

Silvia: Y la responsable de políticas de moderación, que tomó la decisión de suspender permanentemente la cuenta de Twitter de Donald Trump. 

 

Mario: Eso lo hizo el primer día. De primeras nada más llegar. El problema es que después despidió a la mitad de la plantilla, prácticamente, y después le han ido abandonando aparte otros de los pocos directivos que habían sufrido la purga. Y entonces, para ya rematar, hace unos días les dio un ultimátum y les dijo que o estaban dispuestos los trabajadores a trabajar como nunca, vaya, o que abandonaran la empresa en 36 horas. 

 

Silvia: Musk envió a todos los trabajadores de la empresa un formulario donde les pedía trabajar mucho más duro si querían permanecer en la compañía. El ultimátum decía: “Si estás seguro de querer formar parte del nuevo Twitter, por favor, haz clic en el enlace de abajo”. Allí podían seleccionar una opción que decía Sí. De no hacerlo, serían despedidos. 

 

Mario: Entonces, claro, no se sabe todavía cuántos han dicho que no, pero las filtraciones sí que indican que ha sido al menos más de la mitad de los trabajadores que quedaban. Entonces, que toda esa gente ahora tenga que afrontar los retos que está poniéndose en equipos mucho más pequeños y con todos los problemas económicos que tiene Twitter. Que no olvidemos que Musk le ha endosado una deuda de 13 mil millones de dólares por la propia compra. Pues, es bastante difícil que pueda prosperar a ojos de cualquiera. De hecho, Twitter te está dando problemas técnicos.

 

Silvia: Sí, eso te iba a preguntar, o sea, en términos prácticos, ¿qué significa para el usuario que se haya reducido tanto los números de empleados?

 

Mario: Por ejemplo, hace unos días empezó a fallar la verificación en dos pasos y no se descarta que vayan fallando algunas otras piezas del código. De hecho, hubo, en alguna ocasión el propio Musk ha tenido que pedir a trabajadores que habían despedido que vuelvan. Porque claro, si despides a la persona que ha hecho un código y no te indica nada de cómo funciona, no te explica nada. Entonces, puedes seguir funcionando y operando con relativa normalidad. Pero es que cuando hay algún problema o fallo en el código o hay que corregir algo, no se sabe muy bien qué puede ocurrir.

Silvia: Como mencionábamos al principio, en la última semana hemos visto algunas personas preocupadas por el futuro de Twitter, que han dicho que podrían abandonar esta red social. Pero, la verdad es que aún no hemos visto un éxodo masivo. También hay mucha gente que ha comenzado a despedirse como si el colapso de la plataforma fuera inminente. Pero Mario piensa que esto podría ser exagerado.

Mario: Ahora mismo no hay ningún indicador para pensar que Twitter vaya a tener un cierre próximo, ni nada similar. Sí que puede que empiece a funcionar un poco peor, pero que llegue a ese nivel de colapso no parece ahora mismo muy probable. Pero bueno, como todo va cambiando, igual en unos días vuelve a haber un giro de guión y vemos algo así. 

Silvia: Ya volvemos.

 

Silvia: Si escuchas El Hilo y también nuestro podcast hermano, Radio Ambulante, queremos pedirte un favor. Radio Ambulante Studios, nuestra casa productora, acaba de lanzar una encuesta para aprender sobre sus oyentes. Sus preferencias, qué funciona y qué no tanto. Y qué debemos hacer en el futuro en El Hilo y Radio Ambulante. Tus respuestas nos ayudan muchísimo. En una encuesta anual, las personas que nos escuchan nos dijeron que querían un podcast que explicaran las noticias en América Latina, a partir de esos comentarios salió la idea de crear El Hilo. Para responder visita radioambulante.org/encuesta. Gracias desde ya. 

 Eliezer: Estamos de vuelta en El hilo. Queríamos entender un poco más sobre quién es Elon Musk y qué puede significar, para la plataforma y para todos nosotros, que haya comprado Twitter. Por eso hablamos con Marta Peirano, periodista e investigadora que escribe sobre tecnología y poder.

 

Eliezer: Hablemos un poco de Elon Musk, de su trayectoria. ¿Cuáles son sus comienzos? ¿Cómo llega hasta acá?

 

Marta: Bueno, Elon Musk nació en Sudáfrica y es el hijo de una familia acomodada, pero bastante desestructurada. Y él hace su primera fortuna vendiendo un proyecto de software, pero más importantemente, por decir la palabra en inglés mal, él es miembro de la que llaman la mafia PayPal, ¿no? de la PayPal Mafia, que es un grupo de gente que se hizo rica vendiendo PayPal, que es el primer sistema de compraventa de intercambio de divisas digital, completamente de Internet y que se hizo rica vendiéndole PayPal a eBay. 

 

Eliezer: Esto fue en el año 2002. Y en esta “mafia”, como la llaman, estaban exempleados de Paypal que luego fundaron compañías como Youtube, Yelp o Linkedin. Y en el caso de Elon Musk…

 

Marta: Pues ya empezó a crecer entrando en proyectos como Tesla, del que no es exactamente el fundador, pero es una parte fundamental de su éxito. Y entrando en proyectos como SpaceX, que desde mi punto de vista es sin duda el proyecto más exitoso de Elon Musk hasta la fecha. Y ahora Twitter.

 

Eliezer: Marta en el mundo de los magnates tecnológicos, ¿en qué se diferencia Musk o en qué se destaca? 

 

Marta: Es una muy buena pregunta. Yo pienso que esta remesa puntocom, que incluye, por ejemplo, a los dueños de las grandes plataformas, desde Jeff Bezos hasta Mark Zuckerberg, a lo mejor pasando por Elon Musk, pues Elon Musk no tiene exactamente una plataforma. Bueno, ahora, lo más parecido que tiene una plataforma es Twitter, que sí es una plataforma, originalmente no es un empresario de plataformas digitales, pero sí está circunscrito al futuro. 

 

Es decir, todos los proyectos que hace, ¿no? son proyectos que miran hacia el futuro, hacia un futuro, pues, de explotación interestelar, como quien dice, ¿no? a un futuro donde existe la minería en otras partes del universo, donde se colonizan, se explotan, se extraen materiales o incluso se llegan a establecer colonias ¿no? que es un poco su discurso más famoso acerca de que se nos acaba la tierra, nos tenemos que ir otras, otras, a otros lugares de la galaxia. Pero también Tesla, los coches eléctricos como un futuro, digamos post petrolífero. Los coches eléctricos como la clave, la figura fundamental de la transición ecológica. Y bueno, todos parecen muy prometedores, todos reciben una gran cantidad de dinero público. Esto no es algo que le pase a todos los empresarios tecnológicos, ¿no? Porque todos están embarcados en una línea de progreso muy concreta, que ahora mismo casi nos parece la única, ¿no? Entonces, pienso que su diferencia, o sea la diferencia de él con respecto a, digamos, sus contemporáneos, en el sentido de la industria tecnológica, es eso: que todos están trabajando sobre el presente, salvo él. O sea, él está haciendo infraestructura para algo que a lo mejor va a pasar dentro de 20 años.

 

Eliezer: ¿Cuál es la reputación de Musk como empleador, como jefe?

 

Marta: Elon Musk con respecto a su papel, digamos, como líder en una empresa, estaba muy vinculado a su leyenda de ingeniero que duerme en la oficina, que duerme en el suelo de las fábricas de Tesla para asegurarse de que las cosas salen a tiempo. Pero ahora que ha llegado a Twitter, que es una empresa que dentro del sector de las empresas tecnológicas era famosa por tener unas condiciones laborales muy buenas, muy generosas, por tener lo más cerca a una cierta paridad de género. 

 

Eliezer: Hasta fines de 2021, el 44% de sus empleados eran mujeres, un porcentaje similar al de Amazon.

 

Marta:  Entonces, claro, él llega a este lugar con la idea ya prehecha de que la gente que trabaja en Twitter son unos vagos, son hippies que van descalzos por la oficina y que no trabajan suficientes horas y que, y que se pasan el día mirando a las musarañas. Y entonces con esa idea llega y evidentemente destruye completamente la cultura empresarial y con la idea de despedirlos a todos. En las últimas semanas, lo que ha demostrado es que lo que quería era deshacerse del mayor número de personas posibles en esta nueva empresa y crear desde las cenizas lo que él piensa que Twitter tiene la posibilidad de ser.

 

Eliezer: Durante toda esta saga de la compra de Twitter, se hicieron públicos unos mensajes entre Musk y sus amigos, su exmujer, personas de su entorno más cercano. Y ahí, dice Marta, quedaron en evidencia dos cosas:

 

Marta: Primero, que ninguno parece muy listo. Esta idea de los grandes genios del mundo de la tecnología, de los visionarios, pues queda muy chamuscada. Pero la otra, la otra idea que te queda es que él está rodeado de gente que le hace mucho la rosca, es decir, raramente hay gente a su alrededor que le dice que no, o que le dice que está equivocado, o que le dice que algo está mal, lo cual no parece un problema inusual para el hombre más rico del mundo. Pero, claro, eso significa que su visión de la realidad está bastante distorsionada y que su idea de su propia imagen está bastante distorsionada. Entonces, él está rodeado de gente que le está diciendo todo el rato si dales lo que se merecen, echa a esos vagos a la calle. Y entonces él, esta actitud para mí lo que revela no es tanto que no le importe lo que piensan de él. Yo creo que le importa mucho lo que piensan de él. Para mí lo que revela es que él piensa que todo el mundo cree que los trabajadores de Twitter eran unos vagos y que entonces llegar y maltratarlos, pues, alimenta su leyenda en lugar de destruirla.

 

Eliezer: ¿Qué gana Elon Musk al comprar Twitter?

 

Marta: Esta es una gran pregunta y yo creo que dadas las circunstancias de los últimos siete meses, pienso que para él mismo esa pregunta ha tenido distintas respuestas. Yo pienso que al principio cuando dijo que la iba a comprar, él creía firmemente que podía, pues, con sus amigos ¿no? recrear un Twitter que él adora y odia al mismo tiempo. O sea, es evidente que Twitter es la gran pasión de Elon Musk, o sea es un hombre que ni con abogados mirándole por encima del hombro es capaz de no tuitear. Tiene una compulsión obsesiva con respecto a Twitter. Y entonces, cuando se va, cuando echan a su amigo de Twitter y anuncian que va a haber grandes cambios, yo pienso que él entra al pánico y dice: Twitter es el único lugar, probablemente en el mundo, en el que yo soy una de las diez personas más cool del universo, ¿no? la que tiene más followers, la que tiene más, ¿no? la que recibe más aplausos, más me gusta, la que recibe más atención.

 

Eliezer: Como vimos en el segmento anterior, no está muy claro exáctamente en qué quería, o quiere, convertir a Twitter. Pero lo que sí sabemos es que justo después de que anunció que compraría Twitter, se empezó a sentir con más fuerza una recesión que está golpeando a la industria tecnológica. Y no estamos diciendo que Elon Musk impulsó esta recesión. No, se trata de un problema complejo, con muchos factores, que está afectando a toda la industria. Seguro han escuchado sobre despidos en Meta, Amazon y otras compañías. Todas estas plataformas están muy vinculadas a la publicidad, y Twitter no es la excepción. A la vez, el valor de las acciones de Tesla también empezó a bajar desde que Musk anunció la compra de Twitter en abril.  

 

Marta: ¿Y qué le va a pasar a Tesla si de repente el CEO de Tesla vende un montón de acciones de Tesla para comprarse Twitter? Es decir, de repente se le hace bola. Claramente ya no le parece tan buena idea comprar Twitter. Y entonces yo creo que aquí el misterio es qué le hizo cambiar de opinión en el último minuto.

 

Eliezer: O sea, qué le hizo al final decidir que sí iba a comprar Twitter, meses después de que había paralizado el acuerdo, de que Twitter lo había demandado para que lo completara, y a menos de dos semanas de que empezara el juicio por esta demanda en su contra.  Hay varias teorías. Marta me mencionó una que está justo relacionada con esto: que Musk prefería no declarar en el juicio, y por eso compra Twitter, para evitarlo. Algo que a Marta le parece una premisa un poco exagerada.

 

Marta: Salvo que en esos mensajes hubiera secretos todavía más oscuros de lo que nosotros pensamos y, bueno, pues es difícil saber qué es lo que pasa por la mente de Elon Musk. Pero, claramente ahora tiene un plan y su plan es deshacerse de la mayor cantidad de personas posibles en ese equipo, quedarse con un grupo que no le cueste mucho dinero, ¿no? porque perder 70% del staff, de la población de los trabajadores de Twitter,pues, es arriesgado, pero también te quitas de encima el 70% de los sueldos.

 

Eliezer: Sabiendo lo que sabes sobre Elon Musk. ¿Te sorprende lo que ha estado haciendo desde que compró Twitter?

 

Marta: Sí, sí, sorprende, desde luego que el hombre más rico del mundo que uno supone que está rodeado de asesores, abogados, digamos, de las personas más conectadas, de los insiders más insiders de este planeta, sorprende que se endeude tanto en un contrato que dos semanas después ya no quiere cumplir. Y la explicación de que es como un niño que no sabe lo que hace me parece aterradora, porque bueno, pues es un niño al que le han dado las llaves de muchos proyectos muy importantes. Ahora mismo en Estados Unidos una de las grandes ayudas que propone Biden es para el coche eléctrico, y esa ayuda va a beneficiar fuertemente a Tesla. Entonces, la idea de que el dinero público para la transición energética esté favoreciendo a una industria que capitanea un niño que no sabe controlarse, pues es aterradora. Entonces, yo prefiero pensar que no es que no es ese el caso.

  

Eliezer: Marta, una pregunta que nos hacemos nosotros y queríamos hacerte es: ¿por qué todo esto –la compra de Twitter por parte de Elon Musk y lo que está haciendo con la plataforma– es algo que debería importarnos, o es algo que es importante incluso para la gente que no usa Twitter? ¿O por qué no?

 

Marta: Twitter es importante porque. Es el escenario del debate público en torno a los aspectos de nuestra vida política y de nuestra sociedad. Es decir, es un centro de participación sobre la sociedad como no lo había habido nunca antes. 

 

Entonces, no todo el mundo tiene la capacidad, o la habilidad, de tener presencia en esos debates, pero por lo menos los puede escuchar, ¿no? Y entonces esto ya ofrece una visibilidad, un espacio que antes no existía. Antes existían los programas de televisión, pero Twitter es otra cosa distinta, ¿no? Es algo mucho más anárquico, donde la participación en las conversaciones es mucho más variada y a veces muy impredecible. Bueno, ese lugar donde se da la conversación es un lugar que tiene un impacto sobre los resultados de esa conversación. Los medios se miran en Twitter para saber qué temas importan. Esto ya es tener una influencia completamente disparatada sobre la conversación en general. Entonces, que esa habilidad quede en manos de un multimillonario que recibe dinero público para proyectar infraestructuras que van a definir nuestras capacidades en un futuro pues es interesante y aterrador. 

 

Yo creo que aquí lo que pasa es que que llegue Elon Musk como un elefante en una cristalería a una plataforma que ha sido tan decisiva en los últimos, no sé, seis años de procesos democráticos en países importantes, pues parece aterrador, pero aquí yo creo que esto lo que hace es evidenciar la imposibilidad de que la plaza pública sea una plataforma privada sin que eso tenga consecuencias. 

 

Eliezer: Tras una votación en Twitter, Elon Musk reactivó la cuenta del ex-presidente Donald Trump. Recordemos que la cuenta de Trump fue suspendida en enero del 2021 tras los ataques al Capitolio. A pesar de la reactivación, Trump dijo que no tenía interés en volver a esta red social. 

 

Esta semana, Musk ha anunciado que no habrá más despidos y que ya está reclutando nuevos perfiles de ingeniería y ventas. 

 

Mariana: Este episodio fue producido por mí, Mariana Zúñiga, y Silvia Viñas. Lo editaron Silvia, Daniel Alarcón y Eliezer Budasoff. Bruno Scelza hizo el fact checking. La mezcla y el diseño de sonido son de Elías González, con música de él y Rémy Lozano.

 

El resto del equipo de El hilo incluye a Daniela Cruzat, Inés Rénique, Denise Márquez, Samantha Proaño, Paola Alean, Laura Rojas Aponte, Juan David Naranjo Navarro, Elsa Liliana Ulloa y Camilo Jiménez Santofimio. Daniel Alarcón es nuestro director editorial. Carolina Guerrero es la CEO de Radio Ambulante Estudios. Nuestro tema musical lo compuso Pauchi Sasaki. 

 

El hilo es un podcast de Radio Ambulante Estudios y Vice News.

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Gracias por escuchar.