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Deportaciones masivas
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El próximo lunes, 20 de enero, Donald Trump comienza su segundo mandato como presidente de Estados Unidos. Su primer gobierno, sus promesas de campaña y la gente que lo asesora nos dan algunas pistas sobre lo que viene, aunque la incertidumbre es inevitable cuando se trata de un líder como Trump. Queríamos saber cómo se están preparando para esta etapa activistas y expertas en dos temas clave: migración y crisis climática. Erika Pinheiro, directora de la organización Al otro lado, nos explica el impacto que podrían tener las deportaciones masivas prometidas por Trump. Luego, para entender qué está en juego en políticas climáticas, hablamos con Antonieta Cádiz, de la organización Climate Power. Y por último entrevistamos a la periodista Leire Ventas, corresponsal de BBC Mundo en Los Ángeles, que nos cuenta lo que está haciendo California, un estado que vive una catástrofe histórica y que es clave para la economía del país, para blindar derechos frente al nuevo mandato de Trump.
Créditos:
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Producción
Silvia Viñas -
Edición
Eliezer Budasoff, Daniel Alarcón -
Verificación de datos
Bruno Scelza -
Producción en redes sociales
Analía Llorente, Samantha Proaño -
Diseño de sonido y mezcla
Elías González -
Música
Elías González -
Tema musical
Pauchi Sasaki -
Fotografía
Getty Images / Rebecca Noble
Etiquetas:
Transcripciones:
Transcripción:
Silvia Viñas: Bienvenidos a El hilo, un podcast de Radio Ambulante Studios. Soy Silvia Viñas.
Eliezer Budasoff: Y yo soy Eliezer Budasoff.
El lunes 20 de enero, Donald Trump comienza su segundo mandato como presidente de Estados Unidos. Hay algunas pistas sobre lo que quiere hacer en los próximos cuatro años… Por lo que vimos en su primer gobierno, por lo que prometió en campaña, por las personas que lo asesoran, y por lo que ha dicho en entrevistas y redes sociales…
Silvia: No vamos a entrar a esta presidencia completamente a ciegas, aunque la incertidumbre es inevitable cuando se trata de un líder político como Trump. Ese espacio entre la familiaridad y lo desconocido es lo que hemos estado tratando de rellenar en estos meses antes del comienzo de su próximo mandato. Y no somos los únicos.
Eliezer: Queríamos saber qué están pensando las personas que trabajan de cerca con los que podrían verse más afectados por las políticas de un segundo gobierno de Trump. Así que buscamos activistas y expertas en dos áreas que van a marcar los próximos cuatro años: migración y crisis climática.
Silvia: Hoy, cómo se preparan organizaciones en terreno para enfrentar posibles deportaciones masivas y el regreso del negacionismo climático. Y qué está haciendo California, un estado que vive una catástrofe histórica y que es clave para la economía del país, para blindar derechos y políticas frente al nuevo mandato de Trump.
Es 17 de enero de 2025.
Silvia: Trump ha dejado muy claro lo que piensa sobre la migración, y los migrantes. Volvamos un momento a cuando fue candidato por primera vez. El día que lanzó su campaña, en junio del 2015, dijo esa frase que ya hemos escuchado muchas veces: que México no envía a su mejor gente a Estados Unidos…
Audio de archivo, Trump: They’re bringing drugs, they’re bringing crime, their rapists. And some I assume are good people…
Silvia: Que llevan drogas, crimen… y violadores, aunque asume que algunos son buenas personas.
Eliezer: Recordemos algunas de las principales medidas migratorias de su primer gobierno, porque hay efectos que se han extendido hasta ahora.
Como presidente, Trump aplicó una medida que llamó “tolerancia cero”. Esta política consideraba que cualquier persona que quería entrar a Estados Unidos sin papeles estaba cometiendo un delito, y debía ser juzgada. Si tenían hijos, perdían la custodia. Entre 2017 y 2021, las autoridades separaron a más de 4,600 niños, incluyendo bebés, de sus padres. Más de mil aún no han vuelto con sus familias, porque las autoridades no han encontrado a todos los afectados. Cuando los oficiales de migración separaron a los niños, no vincularon sus registros con los de sus papás, así que ha tomado años identificar y ubicar a estas familias, y muchos siguen separados.
Silvia: Trump también endureció las reglas para las personas que buscan asilo. Quizás se acuerden de la política “Permanecer en México”. Oficialmente se llamaba Protocolos de Protección a Migrantes. Lo que hacía era mandar de vuelta a México a las personas que entraban sin papeles a Estados Unidos para pedir asilo. Los obligaba a quedarse en México hasta su cita en la corte de inmigración. Esto creó una crisis humanitaria en la frontera…
Eliezer: Que se agravó durante la pandemia, con el Título 42. Empezó como una medida sanitaria que cerró la frontera. Las autoridades migratorias rechazaban y expulsaban a los migrantes inmediatamente. Aunque Joe Biden la criticó, estuvo vigente hasta mayo de 2023.
Erika Pinheiro: Pues, desde el punto de vista de la frontera, sus políticas eran casi igual a las de Trump.
Eliezer: Ella es Erika Pinheiro, directora de Al otro lado, una organización sin fines de lucro binacional. Tienen oficinas en Estados Unidos y México. Dan servicios legales y humanitarios a refugiados, personas deportadas y otros migrantes.
Silvia: Hablamos con Erika para saber cómo se están preparando para una segunda administración de Trump. Pero hay que repasar un poco qué pasó desde la última vez que fue presidente para entender el escenario al que llega. Así que empezamos por Biden.
Erika: No vi mucha más protección para la gente que está pidiendo protección en los Estados Unidos y pues para la gente deportada. Él amplió detención en los Estados Unidos, por ejemplo, y habían otras cosas en que si yo fuera migrante en los Estados Unidos, o si yo fuera latino, un votante latino en los Estados Unidos, yo no sentiría como el Partido Demócrata tendría mis intereses al frente, ¿no?
También en la sociedad general en los Estados Unidos, la imagen del migrante, pues, se ha puesto como algo negativo en los últimos cuatro años. Y los mensajes que, pues estamos recibiendo de la prensa, por ejemplo, era como poniendo los migrantes como invasores, criminales, todo eso, ¿no?
Silvia: Bueno, pero esa imagen negativa contra migrantes… O sea, Trump en su primera campaña dijo que eran violadores.
Erika: Sí, pues, es obvio que durante la primera administración de Trump que habló –y durante la elección– habló feo sobre los migrantes: violadores, criminales, etcétera. Pero yo sentí cómo el público en general no estaba de acuerdo en ese tiempo.
Eliezer: Pero en los siguientes años, durante el resto de la primera presidencia de Trump y luego la de Biden, el sentimiento anti-inmigrante creció.
Erika: Y después de un tiempo se hizo parte del pensamiento común en los Estados Unidos sobre los migrantes. Y les voy a dar un ejemplo. Durante la administración de Trump había un apoyo grande para esas familias separadas. O sea, recibimos donaciones de gente que querían apoyar. La gente en general quería proteger a sus derechos. Y durante la administración de Biden, él siguió separando a las familias, aunque no fue del nivel que está haciendo Trump. Y el público no, no estaba enterado. Y si estaban enterados, estaban como: “Bueno, ellos cruzaron la frontera sin permiso y a lo mejor lo merecen”, ¿no? Entonces, esta manera de pensar sobre las personas que están pidiendo protección en los Estados Unidos cambió completamente durante la administración de Biden.
Silvia: Recordemos que en la campaña pasada, Trump hablaba de una frontera colapsada, pero lo cierto es que en los últimos meses, la situación ha cambiado. En junio de 2024, Biden firmó una orden ejecutiva que prácticamente cerró la puerta a las personas que piden asilo. Se activa cuando las autoridades registran más de 2,500 detenciones al día por una semana. Con eso, consideran la frontera “desbordada” y las personas que cruzan no son elegibles para pedir asilo, a menos que sean víctima de trata, tengan una emergencia médica, o sean niños que viajan solos.
Eliezer: Esta medida, criticada por activistas que la consideran un asalto al derecho a buscar asilo, ha reducido drásticamente los cruces de migrantes. Aunque también ha jugado un papel importante la cooperación de México. El país ha implementado una estrategia más agresiva para detener a las personas que van camino a la frontera. Pero aún hay millones de casos de solicitudes de asilo que no se han resuelto… Gente que está esperando en Estados Unidos.
Erika: El gobierno, en vez de invertir en el sistema de asilo, en jueces o oficiales de asilo, han puesto más recursos en la patrulla Fronteriza, en ICE, en los centros de detención. Entonces, estamos en una situación en donde la gente que está en proceso de asilo están esperando años para resolver su caso. En ciertos lugares es como cinco años o más. Las citas en la oficina de asilo, pues, es lo más demorado que he visto en mi carrera. Entonces, hay miles y miles y miles de personas que están esperando su proceso. Legalmente no pueden ser deportados mientras que estén en ese proceso, pero pues no hay garantía de que Trump va a seguir la ley.
Silvia: Erika habla de deportaciones porque Trump prometió que en su primer día en el cargo lanzará un plan para hacer deportaciones masivas.
Audio de archivo, periodista: El presidente electo Trump prometió mano dura en inmigración.
Audio de archivo, presentadora: Entre sus principales promesas de campaña están las deportaciones masivas de migrantes indocumentados. El 57% las aprueba y un 43% las rechaza.
Audio de archivo, periodista: Dijo al programa Meet the Press de NBC que contempla deportar incluso a ciudadanos estadounidenses, cuando se trata de familias de estatus mixto, con miembros indocumentados.
Erika: En su primera administración no pudo hacer las deportaciones masivas que está hablando ahorita. Pero estamos en otro mundo ahorita. Por ejemplo, la capacidad de detención ha ampliado. Ya están diciendo que van a usar instalaciones militares para efectuar las deportaciones y ya van a poner… Los están llamando campamentos de deportación. Son como carpas grandes en la frontera, ya están hablando de ponerlos en Texas y están hablando de poner otro centro de detención en New Jersey también. Entonces yo creo que ya tienen la capacidad de hacer algo muy feo.
Eliezer: Después de la pausa, Erika nos cuenta cómo se están preparando para enfrentar las deportaciones masivas que ha prometido Trump. Ya volvemos.
Eliezer: Estamos de vuelta en El hilo.
Silvia: ¿Cómo se están preparando ustedes para esto?
Erika: Bueno, como ya tenemos mucha experiencia trabajando con la población deportada y tenemos un programa binacional que es manejado por gente que ha sufrido la deportación, entonces ellos saben mejor lo que necesitan los que están llegando. Abrimos hace poco un centro de bienvenida para deportados en México, que es el primero de su clase, está en Tijuana, y al llegar, como al salir de las puertas les damos la bienvenida, una llamada telefónica, comida, ropa, asesoría legal y albergue, todo eso, ¿no? Todo lo que necesitan. Ya hemos tenido esa experiencia para saber más o menos cómo manejar los desafíos que se enfrentan cuando llegan a su país de origen.
Eliezer: Pero Erika dice que se están preparando para algo más masivo, de dos formas. Primero, en Estados Unidos están coordinando con otras organizaciones que trabajan en centros de detención.
Erika: ¿Cómo vamos a tener acceso a las instalaciones militares, por ejemplo, a los nuevos centros de deportación que están poniendo? ¿Cómo vamos a identificar a los más vulnerables? ¿Cómo vamos a identificar a los que son padres o madres de niños ciudadanos que a lo mejor quieren regresar a México con sus padres? Cosas así, ¿no? Estamos organizando a nivel estatal y nacional. Y estamos coordinando con consulados, con el Gobierno de México en los estados fronterizos y también a nivel nacional, intentando poner unas políticas que van a facilitar la reintegración de esta población.
Silvia: Pero, claro, si Trump cumple con su promesa, no solo van a deportar a mexicanos. Así que al otro lado, la organización que dirige Erika, también está manejando un fondo humanitario para apoyar a pequeñas organizaciones en otros países de América Latina.
Erika: Y estamos buscando a los pocos, porque hay muy pocos que ayudan a la gente cuando llegan deportados a sus países. Ya estamos en contacto con organizaciones en Centroamérica y en Sudamérica también, pero estamos haciendo lo posible para preparar. Pero si es masivo y si miles de personas llegan al día, pues va a ser muy feo. No solo para los individuos que sufren este shock de ser deportado, pero para los países que los están recibiendo, porque es como, la reintegración no es nada fácil.
Eliezer: Erika dice que se habla poco sobre qué pasa después de una deportación.
Erika: Eso es mi enfoque, porque hemos visto como cómo duele cuando es olvidado, ¿no? Y eso pasa con muchos deportados. Todos tus derechos ya no son respetados o pues están olvidados después de la deportación y no queremos que eso pase, ¿no? Porque siguen siendo seres humanos, siguen siendo padres, madres, hijos.
Eliezer: Para que estas personas puedan reintegrarse a su país de origen, Erika dice que las autoridades tienen que priorizar algo que puede sonar muy básico, pero es fundamental: ayudarles a conseguir documentos de identidad. Llegan muchas veces en estado de shock, con la ropa que llevan puesta y poco más. Y necesitan documentos para abrir una cuenta de banco, trabajar, alquilar un departamento, recibir dinero de sus familiares…
Erika: Y hemos visto que la gente dura como dos, tres meses, a veces intentando sacar sus documentos. Y hay gente que nunca lo logra. Y estas personas caen en situación de calle, enviciados en drogas, así, ¿no? Caen en muchos problemas. Y eso es algo que en muchos países es un problema: darle a la gente deportada su identificación para que puedan hacer todo lo que necesitan hacer para vivir su vida en su país de origen.
Silvia: También tienen que ayudar a reunir a familias afectadas, dice Erika. Hay unos 4 millones de niños con al menos un padre indocumentado en Estados Unidos. En algunos casos puede que se queden si deportan a su padre o madre, pero otros van a querer o tener que ir con ellos…
Erika: Y los países de origen tienen que facilitar el proceso de regularizar a estas personas, darles acceso a la educación. En muchos países no tienen, por ejemplo, un sistema educativo que trabaja con gente que no habla el idioma, en ciertas partes de México sí tiene y en otras partes no, entonces hay mucho que hacer para asegurar que esas familias no serán separados por mucho tiempo y para facilitar la reunificación familiar en países de origen, porque la verdad no creo que va a abrir mucha oportunidad para la persona deportada a regresar a los Estados Unidos mientras que Trump está en la oficina, ¿no? Y hemos visto en miles de casos… personas que no han visto a sus hijos después de una deportación. Y es algo que es muy feo, y pues esperamos más cosas feas en esta administración. Por lo menos la gente ya está hablando de la gente deportada y ojalá que ya van a poner más recursos para esta población y más atención.
Silvia: Y sobre este plan de deportar a millones de inmigrantes indocumentados. ¿Qué tan realista ven que lo pueda hacer? Porque la Constitución ¿no? dice que tienen que pasar por un proceso legal antes de ser deportados, por un juicio. Entonces la pregunta que nos hacemos es, ¿cuánto es Trump un poco diciendo lo que la gente quiere oír, y amenazando, y cuánto es en realidad lo que puede hacer legalmente? Tú decías, puede que no siga la ley.
Erika: Sí, pues si sigue la ley, eso no implica que, pues, todos van a poder ir por un proceso.
En muchos casos, especialmente si no tienen acceso a un abogado en un centro de detención, la gente acepta la deportación voluntaria. En muchos casos, los agentes de inmigración les dicen: “No tienes defensa, va a quedar en detención por mucho tiempo”. Así, ¿no? A veces es mentira. A veces es la verdad. Pero en muchos casos la gente no, no quiere. Y además, no tienen derecho a un abogado en el procedimiento de deportación. Hablando de la gente que sí van por el proceso, es muy alto el índice de personas que pierden su caso en la detención.
Y pues los mexicanos son como la mayoría de la gente indocumentada en los Estados Unidos y lo más fácil a deportar. Pero la comunidad migrante es muy diversa. Hay algunos países que no aceptan a los deportados o es más difícil, la logística es más difícil, pero yo creo que para los mexicanos y centroamericanos ya hay un sistema bastante eficiente para deportarles.
Eliezer: Estados Unidos tiene acuerdos con la mayoría de estos países para identificar a la gente… no por sus documentos, sino por sus datos biométricos, como sus huellas, o por reconocimiento facial.
Erika: Entonces eso puede facilitar la deportación. Y como dije, si no tienen acceso a abogados en ese centro es que van a poner unas instalaciones militares, es posible y probable que puedan efectuar las deportaciones de manera masiva.
Silvia: Es probable que nos escuchen personas que tienen miedo por lo que se viene, ya sea por ellos mismos o por familiares, amigos o colegas de trabajo ¿Qué les dirías a estas personas? ¿Qué pueden hacer las personas que ven que lo que Trump ha prometido puede afectarles directamente?
Erika: Pues yo he visto que en los lugares donde hay muchos migrantes ya han activado las redes de apoyo. Entonces, hay que acercarse a las organizaciones legales para conocer sus derechos. Aunque no es garantizado de que van a respetarlos, por lo menos saberlos. Yo creo que en mi experiencia es importante saber qué es una orden de arresto y qué no es una orden de arresto. No debe dejar a los agentes de migración entrar a su casa sin orden de arresto. Muchas veces muestran un papel que no es… no tiene nada que ver. Pero dicen que sí es orden, mienten. Entonces yo sé que en muchas ciudades por todos los Estados Unidos ya están planeando dar esas charlas de orientación legal. Es importante asistir, saber, conocer sus derechos, exigir sus derechos, saber que en detención los agentes de inmigración les puede mentir para obligarle deportar a sí mismo. Sí tiene derecho a ver a un juez. Y pues exigir ese derecho si quiere pelear su caso.
Pero saber también que, pues, hay sueños en ambos lados de la frontera, no es el… Puede tener otra vida después, no es como el final ¿no? Y tener esta esperanza de que todo puede salir bien, lo que pase, ¿no? He visto mucha gente deportada que tiene, ha tenido mucho éxito en su país de origen. Su familia está con ellos, por ejemplo. Y tienen sus negocios. Lo que sea. Entonces, no pensar en la deportación como el fin de su vida.
Eliezer: Después de la pausa hablamos con una experta sobre cómo se está preparando para trabajar en otro tema que va a ser fundamental para los próximos cuatro años: la crisis climática.
Ya volvemos.
Eliezer: Estamos de vuelta en El hilo. En junio de 2017, Trump, en ese momento presidente, hizo este anuncio:
Audio de archivo, Trump: Para cumplir con mi solemne deber de proteger a Estados Unidos y sus ciudadanos, Estados Unidos se retirará del Acuerdo del clima de París.
Silvia: El Acuerdo de París es un tratado internacional que establece ciertos compromisos para reducir las emisiones de dióxido de carbono, bajar la temperatura del planeta, y en general luchar contra el cambio climático. Este anuncio de Trump no fue una gran sorpresa. Ya había dicho que el calentamiento global era un engaño. En 2012 tuiteó que era un invento de China para perjudicar a Estados Unidos.
Eliezer: Esta salida del Acuerdo de París no se hizo oficial hasta el 2020. Y el primer día de su presidencia, Biden reincorporó a Estados Unidos al tratado. También dejó claro que la crisis climática sería una de sus prioridades.
Silvia: Así que, en este escenario, queríamos saber cómo las personas que se dedican a combatir esta emergencia mundial se están preparando para otros cuatro años de Trump –para el regreso al negacionismo climático y lo que pueda venir…
Silvia: ¿Cuál fue tu reacción cuando te enteraste que Trump había ganado?
Antonieta Cádiz: Bueno, Silvia, me costó. Yo te diría que todavía no me he recuperado.
Eliezer: Ella es Antonieta Cádiz, de Climate Power, una organización de comunicaciones estratégicas que, como dice su nombre, se enfoca en temas relacionados a políticas climáticas.
Silvia: Antonieta es la directora ejecutiva adjunta de Climate Power en Acción, un proyecto de esta organización hecho por y para latinos. Hacen encuestas, campañas, trabajan con organizaciones y líderes comunitarios… Y se concentran en contar la historia del clima.
Antonieta: ¿Y qué quiere decir eso? Por un lado, tiene que ver con el impacto: cómo la crisis climática nos está impactando día a día a nivel personal.
Silvia: Y por otro lado, se dedican a contar cómo algunas soluciones en términos energéticos y económicos tienen impactos positivos en nuestras vidas. Durante la campaña presidencial, Antonieta también fue parte de una coalición de diferentes organizaciones latinas que estuvo advirtiendo sobre los riesgos del Proyecto 25. Ese es este plan de más de 900 páginas que impulsaron la Heritage Foundation y cerca de 100 grupos conservadores… Y que incluye, entre otras medidas, deshacerse de protecciones climáticas… Trump trató de distanciarse de este plan, aunque lo menciona a él o a su gobierno cientos de veces. Y entre los autores del proyecto figuran varios exfuncionarios de su primer mandato.
Eliezer: Pero incluso si ponemos de lado este “Proyecto 25”, Trump ha dejado muy claro lo que piensa sobre la crisis climática y el futuro energético del país. No solo durante su presidencia anterior, sino también como candidato por segunda vez. Así que es fácil entender la reacción de Antonieta a la victoria de Trump en noviembre…
Antonieta: Fue un golpe bien duro ver cómo un candidato, un expresidente que sabemos que tiene una política completamente anti clima, que vimos durante el ciclo de elecciones, por ejemplo, que se reunió con donantes del gas y petróleo…
Audio de archivo, periodista: En una reunión con altos ejecutivos petroleros, Trump señaló que le pondrá fin al mandato de Joe Biden sobre los autos eléctricos. Esto hace referencia a las nuevas normas sobre emisiones, y eliminar las congelaciones para permisos de nuevas exportaciones de gas natural.
Antonieta: Y cuando vemos ahora las nominaciones que está haciendo.
Audio de archivo, periodista: Chris Wright, magnate del fracking y escéptico del cambio climático será su secretario de energía.
Audio de archivo, periodista: Wright es un ejecutivo de combustibles fósiles. Públicamente ha dicho que no cree en el cambio climático.
Antonieta: Y cómo eso es consecuente con su discurso de campaña y con las promesas que hizo. Es súper difícil, la verdad. Es súper difícil, porque cuando tú piensas en estos últimos cuatro años ves todo el progreso en clima que logramos. Y luego piensas en los próximos cuatro años y dices: wow ¿Qué vamos a hacer? ¿Cómo vamos a enfrentar lo que viene? ¿Cómo ganamos de nuevo?
Silvia: Tocaste algunas cosas que me gustaría profundizar un poquito brevemente. ¿Qué prometió Trump que haría en este segundo mandato sobre políticas relacionadas a la crisis climática?
Antonieta: Bueno, yo te diría que uno de sus principales lemas de campaña era Drill, baby Drill.
Audio de archivo, Donald Trump: We will drill, baby, drill.
Antonieta: Él siente que la política energética de Estados Unidos tiene que estar anclada en el desarrollo de combustibles fósiles y la producción de gas y petróleo, por supuesto. Eso es súper problemático. Y es un modelo que no es sostenible en el tiempo por una serie de razones. Vemos que el Departamento de Energía va a estar dirigido por un básicamente una persona que De hecho, salió diciendo en algunas entrevistas que es bueno tener cierto cambio climático para la sociedad. Entonces, es súper preocupante, súper preocupante. Eso por un lado. Y por otro lado está el tema de las acciones ejecutivas, que no es un tema menor.
Eliezer: Ya lo hizo la primera vez que fue presidente. En 2017, Trump firmó una orden ejecutiva que suspendió varias medidas medioambientales que había promulgado Barack Obama y reforzó el uso de combustibles fósiles.
Silvia: Durante la campaña para estas últimas elecciones, Trump prometió que en su primer día como presidente firmaría una orden ejecutiva para aumentar drásticamente la perforación de pozos de petróleo y gas. Un asesor de Trump dijo que eso reduciría los precios y la inflación.
Eliezer: Antonieta resaltó que Trump podría usar las órdenes ejecutivas para impulsar medidas que afectan el día a día de las personas de manera muy directa… Como cambiar los estándares de contaminación del aire, algo que regula la Agencia de Protección Ambiental.
Silvia: Por cierto, para liderar esta agencia, Trump nombró a un excongresista, aliado suyo, sin experiencia en este sector, y que, según el equipo de transición presidencial, va a implementar, cito, “decisiones desregulatorias justas y rápidas” para “liberar el potencial de las empresas estadounidenses”.
Antonieta: Entonces cuando tienes una nueva administración y tienes todo el poder de la Agencia de Protección Ambiental, tú puedes cambiar esos estándares. Por supuesto que vas a encontrar resistencia, pero tienes el poder de cambiarlo. Y en este minuto, los republicanos y el presidente Donald Trump tienen la Casa Blanca y tienen la mayoría en el Congreso. Por lo tanto, es el momento para tomar esas decisiones que van a repercutir en el futuro de todos.
Eliezer: Como escuchamos hace un rato en un clip de archivo, Trump prometió revertir políticas climáticas de Joe Biden, como un mandato sobre autos eléctricos. Cuando le preguntamos a Antonieta sobre otros posibles cambios, nos dijo que lo que más les preocupa es qué va a pasar con la ley climática que se aprobó en 2022.
Silvia: Esta ley destinó casi 400 mil millones dólares para reducir las emisiones de carbono y avanzar en energía limpia: solar, eólica…Biden la describió como la acción más agresiva jamás emprendida para enfrentar la crisis climática.
Antonieta: Hay un componente súper importante de una expansión sostenida de la energía limpia a nivel local. Esos son miles de millones de dólares que han ido a comunidades, créditos tributarios importantísimos. La implementación de esa legislación es una implementación que se pensó a diez años plazo, es decir, de 2022 a un poquito más allá del 2030. Por lo tanto, en fases. Hay mucho de ese financiamiento, mucho de esos fondos, que el Congreso tiene el poder de apropiar de otra forma a través del comité de apropiaciones, atribuirlos a otros programas, desviar esos fondos, reducirlos, eliminarlos, como quieras llamarlo, pero hay muchos cambios que se pueden lograr.
Eliezer: Aunque no lo van a tener fácil. Podría haber un costo político para algunos legisladores, porque estas inversiones en energía limpia crearon más de 400.000 empleos en 48 estados, según un reporte de Climate Power. Y Antonieta dice que ese número va a crecer. Son trabajos, por ejemplo, en eficiencia energética y energías renovables; para fabricar autos eléctricos, actualizar baterías y redes eléctricas. Mecánicos, trabajadores de la construcción, electricistas y otros han encontrado empleos con mejores salarios en este sector, la mayoría en distritos republicanos.
Antonieta: ¿Qué va a pasar con todos esos trabajos? ¿Qué va a pasar con todos esos negocios que contaban con esa inversión? Entonces nos preocupa mucho el futuro de esos créditos tributarios, el futuro de esas inversiones.
Silvia: Los legisladores –incluso los republicanos– saben que revertir esas inversiones puede tener un impacto negativo, y muy visible, en sus votantes: trabajos perdidos, cierres de negocios locales… La ley climática de Biden ha beneficiado muchísimo a distritos republicanos. Antonieta dice que aunque el cambio climático se ha retratado como un tema partidista, y hay una división clara entre los demócratas y la mayoría de los republicanos, el discurso cambia cuando hablas de la economía, de trabajos…
Antonieta: Ya salieron 18 republicanos en una carta diciendo que estas inversiones no se podían revertir, que no había que tocarlas y que necesitábamos protegerla. So… hay un tema ahí también que es bipartidista, que tiene que ver con la economía, que tiene que ver con los costos, que tiene que ver con la protección de nuestros trabajadores, donde republicanos y demócratas sí pueden encontrar consenso.
Eliezer: Así que parece que para Trump no va a ser tan fácil revertir todo lo que hizo Biden. También porque los votantes en estas elecciones mostraron que el clima es una preocupación real, y que afecta su decisión cuando tienen que escoger entre candidatos locales. Por ejemplo, en estados como Arizona, donde se vive la crisis climática muy de cerca, ganó un senador que en su campaña habló de los efectos del calor extremo, de la sequía…
Antonieta: O sea, cuando hablamos de los récords de calor, y de que estos récords de calor ponen en riesgo a las personas que trabajan afuera, ponen en riesgo a comunidades más vulnerables, niños y ancianos, Arizona es el epicentro de eso. La mayoría de los récords de calor se dan en ese estado. Entonces, muy lógico que una persona como el ahora senador electo Rubén Gallego, que se centró en esos temas, fue capaz de ganar.
Silvia: Y esto no debería sorprendernos si vemos los resultados de las encuestas después de estas elecciones. Aunque haya ganado Trump con sus promesas de reducir la inflación y los costos de la comida y la gasolina, cuando le preguntan a los votantes sobre el clima, la gran mayoría apoya que se invierta en energías limpias para crear empleos y bajar los costos de la electricidad. Más del 80% está a favor de este tipo de medidas, según la encuesta American Electorate Voter Poll, en la que participó Climate Power con preguntas sobre el clima.
Antonieta: El apoyo está ahí y las personas sí le dan importancia al cambio climático, sí quieren un aire y un agua limpia para su familia. Es algo básico y lo entienden. Nuestra comunidad lo entiende. Lo que pasa es que en el universo general de lo que se trató esta elección, por supuesto que ahí hubo otros factores que se conjugaron, ¿no? para el resultado que vimos.
Silvia: Bueno, entonces, sabiendo todo esto y más que ustedes saben, como expertos, ¿cómo se están preparando para estos próximos cuatro años?
Antonieta: Yo te diría que nos estamos preparando en dos frentes específicos. El primero es… Acá en inglés, le decimos accountability, yo te lo voy a traducir como responsabilidad. Es decir, sabemos que hay una serie de decisiones que se van a tomar y que ya se están tomando, que van a tener que ver con nuestro bienestar a nivel de justicia medioambiental, política ambiental, cambio climático. Cómo nosotros comunicamos el impacto de esas decisiones es el trabajo que se viene.
Eliezer: Por ejemplo, si el gobierno de Trump cambia los estándares de contaminación para autos, o la distribución de fondos para buses eléctricos, Antonieta y su equipo van a aterrizar estas decisiones políticas a la vida real de las personas: qué implica en su rutina diaria, cómo va a afectar su salud, sus costos…
Antonieta: Dar ese contexto y contar esa historia es súper importante durante los próximos años. Eso es por un lado. Y por otro lado, está el tema de lo que hablábamos anteriormente: OK, todo este progreso que ya tiene un impacto económico local. ¿Cómo protegemos ese impacto económico? ¿Cómo logramos proteger las inversiones que ya se han logrado en energía limpia?
Silvia: Eso va a ser importante para poder reducir emisiones, algo que es clave para mitigar los efectos de la crisis climática… Pero también porque, como nos explicó Antonieta, en Estados Unidos hay demandas energéticas que no se van a suplir solo con combustibles fósiles. Es el caso del sector tecnológico. La Inteligencia Artificial, por ejemplo, procesa grandes cantidades de información, y eso consume mucha energía…
Antonieta: Cómo el crecimiento de una economía de energía limpia puede sustentar esa transición es un tema del que tenemos que hablar y que prácticamente en nuestro caso, en el caso de los medios latinos, etcétera, no hablamos de estos temas, ¿no? Es muy importante poner eso de relieve.
Eliezer: Y Antonieta dice que también se están preparando en el área de liderazgo. Quieren que líderes latinos que trabajan en diferentes organizaciones, de cerca con sus comunidades, puedan apoyarse entre ellos…
Antonieta: Por ejemplo, en mi caso, yo estoy pensando mucho en la migración climática: cómo este tema y esta intersección es tan relevante para nuestra comunidad, cómo vemos las consecuencias del cambio climático en nuestros países de origen y cómo eso es un factor decisivo cuando hablamos de migración. ¿Cómo comunicamos eso? ¿Cómo hacemos que la narrativa tan tóxica de migración cambie? Entonces son todas preguntas abiertas, pero en el trabajo conjunto está la respuesta.
Silvia: ¿Qué pueden hacer las personas que están preocupadas sobre la crisis climática en estos cuatro años?
Antonieta: Bueno, yo te diría que hay muchas cosas que pueden hacer. La primera es compartir sus historias, porque por ejemplo, yo ahora que estoy pensando y estoy en la etapa como de planificación y ejecución, pensando en los próximos años, una de las preocupaciones que tengo es cómo contamos esta historia y la hacemos personal. Para mí es personal, para mí es tremendamente personal, Silvia. Pero yo vengo de una realidad donde mi casa se inundó con un huracán histórico. O sea, para mí realmente es personal y lo entiendo desde ese punto de vista. ¿Cómo hacemos que ese mensaje se haga tan real y tan personal para millones de personas? Entonces, yo creo que la clave ahí son las historias. Que las personas de todos los ámbitos de vida sean capaces de compartir su historia. Y cómo logramos generar canales efectivos de comunicación que puedan multiplicar esas historias.
Silvia: Antonieta dice que también es importante que los ciudadanos le hagan sentir a las personas que están en el poder la responsabilidad que tienen.
Antonieta: Por ejemplo, cuando haya decisiones que tienen que ver con un impacto muy real en sus comunidades, en la calidad del aire o calidad del agua, hacer sentir esa presión a los representantes, porque al final del día las personas que están en Washington y que se sientan en los escaños del Capitolio están ahí porque representan a alguien más. No están ahí porque sí. Están ahí porque tienen votos detrás de ellos.
Entonces siempre ejercer presión sobre las personas que están tomando las decisiones por sobre todos nosotros. Y con eso hablo de opinión pública, con eso hablo de llamadas al Congreso, con eso hablo de movilización a nivel de comunidades, hablo de una serie de cosas que tú puedes hacer desde tu individualidad, con tu granito de arena, para mover voluntades y demostrar que este tema es importante para ti y que las decisiones que se tomen tienen un impacto en tu vida y tú lo sientes. Lo sientes como votante, lo sientes como persona que es parte de una comunidad, lo sientes como parte de tu familia. Lo sientes como la comunidad que somos acá en este país, porque los latinos por muy diversos que seamos, por diversas áreas que vivamos en este país, etcétera, nosotros aportamos muchísimo a esta sociedad en distintos niveles. Y ese aporte también en el debate del clima es muy relevante.
Eliezer: Después de la pausa, qué está haciendo el estado de California para volverse “a prueba de Trump” en políticas climáticas, migratorias, y reproductivas.
Silvia: Estamos de vuelta en El hilo. En las últimas semanas, al menos dos docenas de personas han muerto en los incendios de Los Ángeles. Al cierre de este episodio, la destrucción que ha dejado el fuego es un poco más grande que el tamaño de Washington D.C.
Eliezer: Y a días de asumir la Presidencia, Trump ha estado criticando el manejo de esta emergencia con un blanco específico: el gobernador demócrata Gavin Newsom. Lo ha culpado por la catástrofe, con comentarios que incluyen afirmaciones falsas, y ha dicho que debería renunciar.
Silvia: Newsom apuntó a la falta de empatía de Trump, por politizar el sufrimiento de los afectados, y dijo que tenía muchos pensamientos que quería decirle al presidente electo, pero que no lo haría. Lo invitó a recorrer las áreas afectadas, pero al cierre de este episodio, Trump no había ido.
Eliezer: Pero esta pelea de poder entre Trump y el gobernador Newsom tiene antecedentes: 48 horas después del triunfo de Trump en noviembre, Newsom reaccionó así, cito: “Las libertades de las que gozamos en California están bajo ataque y no nos vamos a quedar de brazos cruzados. Ya hemos hecho frente a este desafío antes y sabemos cómo responder”.
Silvia: Para entender a qué se refería Newsom, y qué ha empezado a hacer su estado antes del segundo mandato de Trump, hablamos con ella:
Leire Ventas: Soy Leire Ventas. Soy la corresponsal de BBC Mundo en Los Ángeles.
Silvia: Bueno, Leire, ¿te sorprende que Newsom haya reaccionado así?
Leire: En realidad no. En realidad no. Los líderes de este estado siempre llevan años presentándose como un baluarte contra el extremismo de derecha. Pero Newsom en particular se ha posicionado a nivel nacional como uno de los más críticos, uno de los críticos más acérrimos de Trump. Lleva años haciéndolo.
Eliezer: Aunque Leire resaltó que durante la campaña mantuvo un perfil un poco más bajo, quizá para dejarle el protagonismo a Kamala Harris. Pero ahora, el Partido Demócrata no tiene un liderazgo claro, y eso puede ser una oportunidad para Newsom…
Leire: Con esta postura tan vocal, hay quien señala que Newsom en realidad está allanando el camino hacia una candidatura demócrata para la presidencia de 2028, porque ya no se puede presentar a gobernador y él aspiraría a la presidencia. Lo ha negado en el pasado, pero nunca ha estado… nunca ha dejado de estar en las quinielas.
Silvia: ¿Cómo reaccionó Trump a lo que dijo Newsom?
Leire: Pues la reacción de Trump tampoco se hizo esperar. Utilizó el apodo que más, su apodo favorito para el gobernador. Hizo un juego de palabras con su apellido y escoria en inglés y le llamó Newscum. Y después hizo un guiño a su propio lema de campaña y lo acusó de entorpecer todas las grandes cosas que se pueden hacer para que California vuelva a ser grande.
Silvia: Antes de repasar algunas de estas medidas que han tomado o que quieren tomar en California, ¿por qué es importante que este estado en particular tome medidas especiales a “prueba de Trump”, digamos?
Leire: Es que si hay una entidad que puede hacer contrapeso a una trifecta de poder republicana –que es como se llama en la jerga política de Washington al escenario en que vamos a enfrentar, que es el partido del presidente que también controla ambas cámaras del Congreso–, ese estado es California. No solo porque es el Estado más poblado del país, tiene 39 millones de habitantes, también por el tamaño de su economía puede sacudir mercados con su economía, ¿no? Se calcula que si fuera una nación, sería la quinta economía más grande del mundo. Y aparte es el estado que más ha estado en el punto de mira de Trump. Representa todo lo que Estados Unidos no quiere que sea. Y como consecuencia, en vista de las promesas electorales y de la gente que ha ido seleccionando para puestos clave de su administración, es probablemente el estado que más tiene que perder.
Silvia: ¿Por qué?
Leire: No hay más que fijarse en lo que fue su, lo que ha sido y lo que sigue siendo el buque insignia: la promesa de la mayor deportación de la historia de Estados Unidos. En California viven 10 millones de personas que nacieron en el extranjero, incluidas 1,8 millones de personas sin un estatus regular. Y aparte, es el segundo estado, después de Nevada, que tiene más familias con miembros en situaciones migratorias mixtas. Esto es, los hijos son ciudadanos estadounidenses por nacimiento, pero uno o ambos progenitores no tienen papeles. Y una deportación masiva para California, pues sería un drama humano, como lo apuntan muchas organizaciones. Pero no solo eso, también sería un batacazo económico. Y es que muchos sectores productivos del estado dependen altamente de la mano de obra indocumentada, como podría ser la agricultura o la construcción.
Silvia: Bueno, entonces, ¿qué está haciendo California para prepararse para este nuevo mandato de Trump?
Leire: Lo primero que hizo Newsom fue convocar una sesión extraordinaria en el Congreso estatal para valorar opciones y, sobre todo, para aprobar unos fondos para posibles litigios con la administración Trump, que es un recurso que en los últimos años ha llevado a cabo cada vez más ante la gran división, la polarización política del país.
Eliezer: En esa sesión extraordinaria, que fue el 2 de diciembre, un legislador demócrata presentó una iniciativa que destinaría 25 millones de dólares del presupuesto estatal para litigios. Estas son posibles peleas legales entre el gobierno federal y autoridades locales sobre políticas relacionadas con la inmigración, la crisis climática, derechos reproductivos y civiles…
Leire: Hubo mucho debate porque los demócratas siguen teniendo súper mayoría, pero los republicanos dicen que es un teatro político, es un gasto innecesario en un estado que ya empieza a tener déficit. Y es que hay que acordarse que ya en el anterior, en el anterior mandato de Trump, California enfrentó más de 100 juicios contra la administración y esto le generó más de 40 millones de dólares del presupuesto estatal.
Silvia: Le preguntamos a Leire qué está haciendo o qué podría hacer California en tres temas específicos: migración, clima y derechos reproductivos. Empecemos con migración.
Leire: Bueno, California es un estado que se considera santuario. Ya llevan años tratando de consagrar protecciones para los migrantes indocumentados. Hay una ley desde 2017 que impide a las fuerzas policiales estatales y locales colaborar en materia de migración con las fuerzas federales, por ejemplo. Y ya después de las elecciones, Los Ángeles, que es la segunda urbe más grande del país, aprobó una ordenanza para que Los Ángeles también sea una ciudad santuario. No pueden ni investigar, citar, arrestar, detener, transferir información en materia migratoria a la administración federal en esos términos.
Eliezer: Además, el condado de San Diego y otros siete han tomado medidas que limitan la cooperación de la policía local con los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés)… los que se encargarían de las deportaciones masivas.
Silvia: OK. Eso por el lado de la migración. En cuando a políticas climáticas, Leire nos dijo que durante décadas California ha sido un referente para otros estados.
Leire: California lo que quiere hacer es, por ejemplo, mantener en pie unos créditos para los coches eléctricos. Y es que fue el primer estado en legislar que para 2035 todos los vehículos nuevos que se vendan en California deben ser eléctricos, de hidrógeno o híbridos. Newsom, ya para tratar de blindar eso se reunió con legisladores en Washington, estuvo tratando de presionar a la Agencia de Protección de Medio Ambiente antes de que asuma Trump para que esas medidas se vayan aprobando cuanto antes.
Eliezer: Los legisladores de California también están tratando de blindar sus políticas relacionadas con los derechos reproductivos. En 2022, unos meses después de que la Corte Suprema derogara Roe v. Wade, el estado consagró el derecho al aborto en su constitución. Desde entonces, el aborto en California es legal hasta la viabilidad, o sea, hasta que el feto está lo suficientemente desarrollado para poder vivir fuera del útero sin ayuda médica. Un doctor puede determinar si el embarazo ya alcanzó ese punto. Pero si la vida de la persona embarazada corre peligro, no hay restricción de tiempo: puede abortar en cualquier momento del embarazo.
Silvia: Y no solo eso. California permite que cualquier persona, de cualquier estado, aborte. Incluso las que viven en los estados que lo prohíben o restringen. No hay que ser residente. Ahora, California quiere expandir estos derechos.
Leire: Entonces, un grupo de congresistas estatales propuso blindar en la Constitución estatal el acceso a los medicamentos que se emplean en los abortos: mifepristona y misoprostol, por ejemplo.
Silvia: Eso tendría que pasar por el Congreso del estado.
Leire: Sí, eso tendría que pasar por el Congreso del estado, donde los demócratas, aunque hayan… aunque Trump tuvo avances en California, siguen teniendo súper mayoría y se prevé que se apruebe.
Silvia: Claro. O sea, la duda que nos surge con esto de los estados tomando acciones como California, que es como un ejemplo, es qué tanto en realidad pueden hacer los estados frente a las políticas de Trump. Porque por ejemplo ahora hablando de derechos reproductivos: si Trump y el Senado que controla, pasan una ley federal que prohíbe estos medicamentos que California está tratando de proteger, ¿qué pasa con la ley de California básicamente? ¿no? O sea, ¿qué tanto poder tienen los estados?
Leire: Sí, eso es lo que están diciendo muchos expertos, que aunque se vaya a repetir un poco el escenario del primer mandato de Trump y se tienda, se eche mano de estos recursos o estos litigios, hay que tener en cuenta que Trump llega mucho más preparado esta vez, que tiene un equipo de asesores que le ayudarían a implementar todos sus planes para el país. Y también tienen un sistema judicial que es más favorable que hace cinco que hace cuatro años, ¿no?
Y siempre podría agarrarse a la cuestión de la preferencia federal, que es una doctrina que dice que la ley suprema del país es la federal y que en ese caso, pues las acciones de los estados quedarían en un plano un poco simbólico, porque tanto el Congreso en los tribunales podría inclinarse por la ley federal ante la ley estatal.
Eliezer: Con este cruce de declaraciones entre Trump y Newsom que les contamos hace unos minutos, ya hemos tenido un adelanto de los términos en que puede darse esta disputa entre la Casa Blanca y los estados, sobre todo en situaciones de crisis.
Silvia: No sabemos cómo Trump va a manejar las secuelas de la tragedia en Los Ángeles, porque sus críticas no han incluido planes concretos. Pero hay algo que todo el mundo parece tener claro: en su segundo mandato Trump tendrá más poder político, con el control de las dos cámaras del Congreso, y de camino a designar una mayoría conservadora en la Corte Suprema… Y también tendrá menos límites para imponer su visión del mundo.
Eliezer: Trump llega también con más poder de comunicación para desinformar e imponer sus propias versiones de los hechos, gracias a su nueva amistad con los grandes empresarios tecnológicos. A su alianza con Elon Musk, el dueño de X, se suma el fin de la verificación de datos en plataformas como Facebook e Instagram, las reuniones en Mar-a-Lago con Jeff Bezos, propietario de Amazon, y los millones de dólares que Microsoft, Google y OpenAI donaron para el acto de asunción. Por eso, activistas como Erika y Antonieta insisten, de diferentes maneras, en la importancia de contar los efectos reales de las políticas antiinmigrantes y la crisis climática… en entender quiénes son, más allá del ruido y la desinformación, los verdaderos afectados. Y quiénes ganan con eso.
Silvia: Este episodio fue producido por mí. Lo editaron Eliezer y Daniel Alarcón. Bruno Scelza hizo la verificación de datos. El diseño de sonido y la música son de Elías González.
El resto del equipo de El hilo incluye a Daniela Cruzat, Mariana Zúñiga, Nausícaa Palomeque, Desirée Yépez, Analía Llorente, Samantha Proaño, Paola Alean, Camilo Jiménez Santofimio, Juan David Naranjo Navarro, Elsa Liliana Ulloa, y Natalia Ramírez. Daniel Alarcón es nuestro director editorial. Carolina Guerrero es la CEO de Radio Ambulante Studios. Nuestro tema musical lo compuso Pauchi Sasaki.
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