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El régimen de Daniel Ortega liberó a 222 presos políticos, los subió a un avión y los desterró a Estados Unidos. Mientras iban en el vuelo, todos fueron despojados de su nacionalidad: estudiantes, periodistas, exguerrilleros, políticos… Esta semana hablamos con las periodistas Luz Mely Reyes, cofundadora de Efecto Cocuyo, y con Dagmar Thiel, directora de Fundamedios, que estuvieron en el aeropuerto al que llegaron en las afueras de Washington, para reconstruir cómo se vivió ese momento. Luego, el periodista Wilfredo Miranda, colaborador del diario El País y cofundador del medio Divergentes, nos cuenta cómo era la vida de ellos en la cárcel de El Chipote, cómo fue su liberación y qué retos enfrentan ahora.
Créditos:
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Producción
Inés Renique, Nausícaa Palomeque, Mariana Zúñiga -
Edición
Eliezer Budasoff -
Verificación de datos
Barbara Medina -
Diseño de sonido y mezcla
Ana Tuirán -
Música
Ana Tuirán, Elías González -
Tema musical
Pauchi Sasaki -
Fotografía
EFE/ Jeffrey Arguedas
Etiquetas:
Transcripciones:
Transcripción:
Ariana Gutiérrez: Lo dejé todo tirado, estaba trabajando, lo dejé todo tirado. Yo dije yo me tengo que ir al aeropuerto, llamé y me dijeron que iban a comunicarse conmigo en unos días, y dije no puedo esperar más, me voy directamente.
Eliezer: Ella es Ariana Gutiérrez Pinto, hija de la defensora de derechos humanos Evelyn Pinto, detenida por el régimen de Daniel Ortega en noviembre de 2021. Es jueves, 9 de febrero, y Ariana está en el aeropuerto de Dulles, en las afueras de Washington, porque espera que su madre llegue en un avión que ha salido esa madrugada desde Managua.
Ariana Gutiérrez: Nos reunimos inmediatamente a venir a recibirlos, hay muchas personas en Nicaragua que tienen a sus familiares que posiblemente vienen en el avión que no están acá, entonces nosotros vamos a recibir a los que tienen familias en DC y a los que tienen familias en otros estados para que ellos puedan llegar a su destino. No nos han dicho nada. Mi mamá es Evelyn Pintos, tiene 63 años. Su cumpleaños es..
Eliezer: Evelyn Pinto estuvo presa en Nicaragua más de un año. Su hija, Ariana, aparece en las imágenes que se difundieron en los medios, con dos banderas de Nicaragua, azules y blancas. Junto a ella, decenas esperan con emoción a 222 personas que acaban de ser liberadas por el régimen de Daniel Ortega. Liberadas y desterradas.
Eliezer Budasoff: Bienvenidos a El hilo, un podcast de Radio Ambulante Estudios y VICE News. Soy Eliezer Budasoff. Esta semana Silvia Viñas está de vacaciones.
La semana pasada, una noticia tomó por sorpresa a la región…
Archivo Presentador: Interrumpimos la programación de CNN español para irnos al aeropuerto de Dulles, a las afueras de Washington. Ahí ven ustedes el avión…
Archivo Personas en el aeropuerto: ¡Queremos libertad!
Archivo Presentador: Así se vivió la emoción y expectativa entre decenas de nicaragüenses que llegaron al Aeropuerto Internacional de Washington D.C. Tras la llegada de este vuelo procedente de Managua con 222 ex prisioneros políticos liberados por el régimen de Daniel Ortega.
Eliezer: Hoy, la historia de la liberación de los presos políticos de Nicaragua, la vida en la cárcel del Chipote y el futuro incierto.
Es 17 de febrero de 2023.
Luz Mely: Estuve en conversación con algunas de las personas que llegaron a Estados Unidos y coinciden en lo siguiente…
Eliezer: Ella es Luz Mely Reyes, periodista venezolana y cofundadora del medio digital Efecto Cocuyo.
Luz Mely: Uno, ellos no sabían absolutamente nada de la decisión.Dos en un caso específico, cuenta que como a las diez de la noche llegaron a la cárcel del Chipote, que era donde estaban muchos de ellos. Llegaron oficiales y altos cargos policiales y militares. Y cuando se iban a dormir, algunos les empezaron a entregar la ropa de civil para que se cambiaran la ropa que utilizan allá de presos.
Eliezer: Y según este testimonio, cuando los prisioneros preguntaban a dónde iban, los encargados les decían…
Luz Mely: Vamos para una actividad especial.
Eliezer: Empezaron a juntarlos en celdas cada vez más grandes. Estaban ahí algunos de los presos políticos más reconocidos de Nicaragua.
Luz Mely: Y hasta que llegaron en un espacio de 20 o 25 personas, ellos empezaron a conversar entre ellos y todos pensaban una o dos cosas. O que los iban a llevar a la frontera con Costa Rica y los iban a dejar ahí tirados como indeseables me dijo una persona, esto es entre comillas, como indeseables. Y otros pensaban que los iban a trasladar a la cárcel Modelo que es otro centro de reclusión que hay allá.
Eliezer: Después de que los suben a unos buses, de camino, empiezan a darse cuenta que en realidad van hacia otro destino… el aeropuerto de Managua.
Luz Mely: Pues allí había un avión, un avión 767 Boeing de la aerolínea Omni. Así me dijo uno de los señores que parece que les gustan los aviones. Por lo menos esta persona llegó a un grupo que fue trasladado casi a las doce de la noche del miércoles.
Eliezer: O sea, la noche antes del vuelo a Washington. Este mismo preso político también le dijo a Luz Mely que en el aeropuerto había una caja con pasaportes.
Luz Mely: Y esos pasaportes eran pasaportes que tenía de emitidos por el gobierno de Nicaragua, que tenían fecha de emisión entre el dos y el cuatro de febrero.
Eliezer: Nuevos pasaportes porque, cuando se los llevaron presos, se los habían quitado… además de todas sus otras pertenencias.
Luz Mely: Esto es lo que más o menos recogí de algunos de los testimonios.
Eliezer: En ese vuelo iban 222 presos políticos, y todos llegaron al aeropuerto de Managua bajo diferentes circunstancias. Algunos tuvieron la experiencia que nos compartió Luz Mely, otros estaban bajo arresto domiciliario y de ahí los llevaron al aeropuerto. Pero fue inesperado para todos.
En la mañana del jueves 9 de febrero, la noticia de este vuelo en dirección a Washington empezó a circular. Primero entre los más cercanos…
Archivo Familiar: Amigas queridas. No he dormido en toda la noche… Se me vinieron a llevar a mi Pedro ayer a las 9…
Eliezer: Estas son algunas notas de voz que los familiares de los presos enviaban para contar la noticia a los amigos y a otros parientes…
Archivo Familiar: Para decirme que iba para una entrevista al Chipote, pero que fuera bien vestido, ¿verdad? Ya se imaginan la tensión y todo, ¿verdad? Pero a medida que pasaba el tiempo y no aparecía, pues estuvimos ya pensando en que en que algo bueno venía, porque además anduvimos, anduvieron antier dejando una certificación…
Archivo Familiar: Querida familia, amigos. Antes que todo quiero darle gloria y honra a Dios por que nos ha concedido el milagro de la libertad de Félix y de las personas presas políticas en Nicaragua. Es confirmado, 222 personas vienen en un avión a Washington, entre ellas está Félix…
Eliezer: Y después se enteró el resto del mundo. También se hicieron públicos los detalles del vuelo. Iba a aterrizar a eso de las 11 y media de la mañana. Luz Mely, que justo estaba en Washington, fue al aeropuerto internacional Dulles cuando se enteró. Ahí se encontró con una escena conmovedora…
Luz Mely: Me conmovieron dos cosas: uno, la incertidumbre, porque algunas personas no estaban seguro de que su familiar o su amigo viniera en ese avión, aunque circulaba una lista de personas liberadas.
Eliezer: Y segundo, la solidaridad que vio. Porque no solo habían ido a esperarlos seres queridos y miembros de la prensa y del Estado, sino también nicaragüenses de la comunidad local. Por ejemplo, Luz Mely conoció ahí a dos mujeres nacidas en Nicaragua que trabajan en el aeropuerto. Ese día ya habían terminado su turno y se habían regresado a sus casas.
Luz Mely: Cuando estaban en sus casas se enteraron de la información que como sabemos fue muy sorpresiva y se devolvieron al aeropuerto. Una de ellas era amiga de un amigo… Y conocía a alguien que conocía a alguna de las personas que venía en el avión. Y ella me dice: y yo me vine para acá para que por lo menos ellos vieran un rostro conocido o un rostro de alguien que conocía a alguien.
Eliezer: Entre las personas que se acercaron a esperar la llegada de los presos políticos estaba Dagmar Thiel, directora de Fundamedios en Estados Unidos, periodista y activista por la defensa de la libertad de expresión.
Eliezer: ¿Dagmar por qué decidiste ir al aeropuerto?
Dagmar: Por la emoción. Es decir, eso de ahí es algo que uno dice. Es que quiero verlo, quiero verlo. Quiero abrazar a aquellas personas por las cuales he estado luchando, por las cuales he estado levantando mi voz. Porque yo no soy nicaragüense yo soy ecuatoriano alemana. Llegué y me encontré con la hija de Pedro Joaquín Chamorro y la abracé y la felicité. Y es más, había alguien con un ramo de flores y casi lo tumbé . Yo lloraba más, yo lloraba más porque ellos se enteraron ayer de noche, los familiares se enteraron ayer de noche y tuvieron tiempo para procesar. No durmieron nada en toda la noche, pero yo estaba ese rato de decir bueno, llevo un par de horas con esta noticia y estoy muy emocionada. Y por otro lado es para reflexionar respecto a cuánto daño pueden hacer las dictaduras en nuestro continente.
Eliezer: Muchas de las personas que iban a llegar en el avión han encarnado durante los últimos años, y desde distintos lugares, la resistencia al régimen de Ortega.
Dagmar: Son personas que han estado algunos desde 2018 detenidas, otros desde el 2021, cuando fue la segunda ola de detenciones y han estado bajo un régimen de tortura. Al menos los presos de conciencia que han estado en la unidad policial Evaristo, conocida como El Chipote, han estado bajo un régimen de tortura. Entonces, el estar en libertad es el mayor anhelo. Y como ellos decían al llegar nadie nos quita los nicaragüenses.
Eliezer: Ortega liberó prácticamente a todos los presos políticos en Nicaragua. Y, según dijo él en conferencia de prensa, sin pedir a cambio que le levantaran las sanciones a su gobierno.
Archivo conferencia Daniel Ortega: No estamos pidiendo nada a cambio. Es un asunto de honor, de dignidad, de patriotismo. Y de… Que se lleven a sus mercenarios. Que se los lleven
Eliezer: Todavía quedan más de 30 presos políticos detenidos en Nicaragua.
Eliezer: A pesar de todo, Dagmar cuenta que la emoción que imperaba ese día era la alegría.
Dagmar: Lo que se sentía mucho es el orgullo. Es el decir lo logramos, ¿no? sí se puede. Había gritos de sí se puede. Lo logramos! Mucha alegría. Y sabiendo que esto es un escalón, probablemente uno de los escalones más dolorosos de saber que tienes familiares.
Dagmar: gente que tenía rehenes, es decir, un opositor político que salió al extranjero y como no lo pudieron agarrar, agarraron a la hermana, al cuñado y al cuñado. Entonces tenía rehenes políticos o una directora de una organización internacional que no la pudieron detener a ella y estaba su hijo preso.
Eliezer: La espera en la zona de llegada fue larga, de varias horas, hasta que les avisaron que no iban a salir por ahí… Desde el aeropuerto los llevaron directamente a un hotel que queda a pocos minutos en auto. Dagmar y Luz Mely fueron a darles el encuentro.
Luz Mely: Fue como, se hizo como el cuartel general. No me gusta decir la palabra cuartel general, pero sí como que el sitio donde el Departamento de Estado ubicó todas las instalaciones para uno, atender a las personas que iban llegando, que los iban trasladando del aeropuerto hacia el hotel y dos como un centro de reencuentro con los familiares.
Luz Mely: Entonces había un salón en donde los familiares y amigos se registraban y podían esperar por su familiar. En uno de los pasillos del hotel, hicieron varios cubículos y allí había un poquito de privacidad. La persona que iba llegando supongo que hace algunos trámites, porque ahí no lo podíamos ver y luego salía, entonces salía hacia un pasillo y allí pues habían vítores y toda la gente que estaba allí, por supuesto con la alegría esperando ver a su familiar o a su amigo salir.
Eliezer: Uno de los encuentros más compartidos en redes fue entre una de las personas liberadas, Cristiana Chamorro, que era la rival más fuerte de Ortega en las elecciones presidenciales de 2021, y su hermano, el periodista Carlos Fernando Chamorro.
En el video del reencuentro, los dos están rodeados de personas aplaudiendo, mientras los hermanos se abrazan. El régimen de Ortega había acusado a Cristiana de lavado de dinero y falsedad ideológica. Estaba bajo arresto domiciliario. También su otro hermano, Pedro Joaquin Chamorro, fue liberado.
Luz Mely: Yo estimo que entre amigos y familiares no había más de 100 personas. Por lo tanto, supongo que había mucha gente que no tenía amigos ni familiares porque los veías que alguna funcionaria entraba a un salón donde se dispuso un salón para que la gente pudiera esperar con tranquilidad y pues a veces salía una funcionaria diciendo un nombre, el nombre de la persona liberada para ver si había algún familiar, y pues a veces no respondía nadie, ¿no?
Eliezer: Y fue entonces que empezaron a entender un poco mejor su situación legal. Estados Unidos había autorizado un amparo humanitario. Esto les permite estar dos años en el país con permiso de trabajo. Pero también se enteraron de algo sin comparación. El régimen de Ortega los había despojado de su nacionalidad. Es decir, se habían convertido en apátridas.
Luz Mely: Ese decreto de que les quitaban la nacionalidad salió mientras ellos estaban volando. Y ellos, por lo menos las personas con las que hablamos, no sabían que les había pasado eso. Ellos decían que iban al destierro sobre todos los candidatos políticos, los ex candidatos, que iban a al destierro, pero que seguían siendo nicaragüenses y todo esto, pero no sabían lo de la nacionalidad.
Eliezer: Hasta ahora, España les ha ofrecido la nacionalidad. No se sabe todavía qué opciones tienen más allá del permiso de dos años en Estados Unidos.
Luz Mely: Pero yo voy a citar una expresión que me dijo un funcionario del Departamento de Estado. Ellos están libres. Ellos ya están libres. Ahora falta que ellos decidan qué hacer con esa libertad. Entonces, ciertamente ellos están libres y están en esta condición de que pueden estar legalmente en Estados Unidos, pero tienen que seguir los procedimientos que establece Estados Unidos, que depende del caso de cada cual, que se verá cuál es el procedimiento.
Eliezer: Ya volvemos.
Inés Rénique: ¡Hola! Soy Inés Rénique, productora asociada de VICE en El Hilo. Un buen propósito para empezar este año es recomendar este podcast: ¿Conoces a alguien que quiere comprender Latinoamérica más allá de los titulares? ¡Recomiéndale que nos escuche! Hacemos periodismo riguroso, de calidad y a profundidad sobre la coyuntura que marca el pulso de nuestra región. Cada vez que recomiendas nuestro trabajo nos ayudas a garantizar su sostenibilidad y a crecer nuestra comunidad. Estamos en elhilo.audio o en cualquier app donde escuches podcast
Eliezer: Estamos de vuelta en El hilo.
Eliezer: Wilfredo ¿Cómo te enteraste de la liberación de los 222 presos?
Wilfredo: Mira, fue una cosa muy inesperada. Me estaba levantando a hacer café y en eso mi celular se volvió loco.
Eliezer: Él es Wilfredo Miranda, periodista nicaragüense, colaborador del diario El País y uno de los fundadores del medio Divergentes. Hablamos con Wilfredo el sábado 11 de febrero. Para este momento, él aún no sabía que, cuatro días después, el régimen de Ortega le quitaría la nacionalidad a él y a otras 93 personas, la mayoría de ellos en el exilio.
Wilfredo: Comenzó a vibrar y era una noticia que estaban circulando a través de familiares de presos políticos. Pero como parecía una cosa increíble que Daniel Ortega y Rosario Murillo liberaran a todos, a casi todos, los presos políticos, es decir, quedándose sin ninguna ficha de negociación entre manos, nos parecía muy raro y comenzamos a corroborar y a recurrir a fuentes estadounidenses cuando nos confirmaron que, efectivamente, ya un vuelo chárter había salido hacía Virginia, a las afueras de Washington, con 222 presos políticos.
Eliezer: Una vez que se supo que la situación era real. Wilfredo pensó en una sóla cosa:
Wilfredo: Me tengo que comprar un boleto, me tengo que ir.
Eliezer: Salir corriendo para Washington. Desde su casa en Costa Rica, donde vive exiliado hace casi dos años. Justamente por el hostigamiento de la pareja presidencial hacia cualquier voz disidente. Wilfredo se tuvo que ir del país para no acabar como los 222 presos políticos que llegaron la semana pasada a Estados Unidos. Algunos estaban encarcelados desde 2018 y otros desde 2021.
Wilfredo: Mira, entre los 222 presos políticos. Es una cosa muy variopinta. Los que estaban desde el 2018 son gente que estuvo en las calles protestando, en las barricadas, en los tranques para protegerse de los paramilitares, en su mayoría estudiantes, jóvenes de barrios pobres, obreros. Y también estaban los otros, más de 40 presos políticos que estaban en El Chipote.
Eliezer: Es una cárcel política, de máxima seguridad, ubicada a las afueras de Managua.
Wilfredo: Y otros bajo el régimen de casa por cárcel, que eran en principio todos los precandidatos presidenciales que la pareja presidencial apresó en 2021 para poder correr en unas elecciones sin competencia y perpetuarse en el poder. También había líderes estudiantiles, periodistas, líderes campesinos, feministas, activistas políticos, me atrevo a decir que cada… del espectro de la oposición, cada uno tenía un preso político, al menos.
Eliezer: Una de las figuras más emblemáticas entre las personas que fueron liberadas es Dora María Tellez, también conocida como La Comandante 2. Dora María luchó junto con Ortega en la revolución sandinista que logró terminar con la dictadura de Somoza, en 1979.
Participó en el gobierno sandinista como ministra de salud, pero finalmente se distanció del oficialismo junto con otros militantes, por diferencias con los manejos de Ortega. En los últimos años se había dedicado a ser historiadora y analista política. Estaba realmente lejos de pertenecer a ningún partido político. Aún así fue perseguida y encarcelada en 2021.
Wilfredo: Uy, mira, Dora María fue la única de las presas políticas que siempre la mantuvieron aislada. Hay una saña, una saña con ella. Y ella siempre estuvo en el pabellón donde mantenían a los presos políticos hombres.
Dora: A mí me tenían en la galería de los hombres. La celda número uno de la galería de los hombres, que era la galería más larga.
Wilfredo: Y Dora María, pues ahora que la entrevistamos cuenta cosas muy escabrosas.
Dora: Ellos jugaron al tema de que nos iban a hacer arrodillarnos, que nos iban a quebrar.
Wilfredo: Describe una cárcel que es El Chipote, construida precisamente para ejercer tortura física y, sobre todo, tortura psicológica.
Dora: Primero estuvimos tres meses sin ver a nadie. De manera que lo único que hacían era admitir dos bebidas al día. Agua y electrolitos orales. El régimen es privación total de todo, de todo. Yo le preguntaba a un oficial la hora y les prohibían entrar con reloj al pasillo. Aquí donde estaba yo, la oscuridad era total.
Wilfredo: Ella dice que logró sobrellevarlo haciendo ejercicio.
Dora: Me hice un programa de recuperación del cuádriceps de la pierna izquierda. Entonces, hice un programa para cada día, varios días diferentes y una parte del programa eran rutinas básicas de karate.
Eliezer: Dora María, que tiene 67 años, también tuvo que entrenar su voz para no quedarse sin habla.
Wilfredo: Cantando bajito, dice ella, cantando bajito, susurrando, porque estaba perdiendo la voz, porque no hablaba con nadie. Y entonces ella nos dice que ella lo miraba como una lucha de resistencia cotidiana.
Dora: Si no me quebraban, si no me lesionaban mentalmente, si no me cagaba en la celda o no me ahorcaba. Yo se los dije clarito y pelado ¿verdad? ¿Ustedes qué es lo que quieren? Que uno defeque sobre el piso de la cárcel. Que se enloquezca, que se ahorque de los barrotes. Eso es lo que están buscando. Porque a eso es a lo que te lleva ese régimen.
Wilfredo: Ella dice que le estaba ganando Daniel Ortega y así lo hizo, pues, hasta el día que el gobierno de Ortega los montó en un avión y los desterró junto a otros 221 presos políticos.
Eliezer: Desde su llegada a Washington, Wilfredo ha entrevistado a algunos de los liberados. Cuenta que muchos no quieren hablar porque temen represalias contra sus familiares, que aún están en Nicaragua. En ese grupo tan amplio de presos políticos hay perfiles tan inesperados como el del periodista deportivo Miguel Mendoza, que también estuvo preso en el Chipote. Wilfredo pudo hablar con él.
Wilfredo: Si vos lo ves, vos no conocés al Miguel de antes de entrar a la cárcel con esta persona cadavérica que salió. También Miguel sufrió tortura física, pero también tortura psicológica.
Eliezer: Miguel no hacía grandes investigaciones que pudiesen ser amenazantes para el régimen de Ortega. Pero, según Wilfredo, la razón por la que termina preso es por reírse de los Ortega en sus redes sociales, donde también denunciaba violaciones de derechos humanos por parte del régimen.
Wilfredo: Como es un cronista deportivo. Los policías lo molestaban hablando de deporte y no le decían los resultados. Entonces, hasta las cosas chiquitas eran bastante. Eran bastante crueles también. Me contó que el día de la final del Mundial de Qatar él escuchaba los gritos.
Eliezer: Esa mañana, Miguel y su compañero de celda estaban tratando de descifrar qué pasaba a partir de los gritos que escuchaban. Parecían celebraciones de gol, pero eran muy seguidas. Una detrás de la otra.
Miguel: Entonces, yo siempre he ido con Brasil. Entonces, le decía: Neymar ha metido tres en seis minutos, jajaja. Pero, me dice Juan Lorenzo Holman, loco es por penales la final. A la puta, y Messi está metiendo los goles. Y le digo, lo peor que me puede pasar es que Messi gane este mundial. No, no, no.
Eliezer: El partido terminó y Miguel y su compañero de celda no supieron ni siquiera quién estaba jugando. Al día siguiente, Miguel le pidió a los carceleros si le podían decir quién había ganado el mundial.
Miguel: Entonces, miraba que que se hacían los locos, como decimos en Nicaragua, daban la espalda, se iban. Entonces, yo entendí que alguien que me escuchó diciendo, pidiendo noticias del Mundial se fue y dijo oye, no le den nada a ese brother.
Wilfredo: Y él hasta que llega a su hija, el 25 de diciembre a una visita, le pregunta ¿quién ganó? ¿Cuál fue el resultado de la final? Y le dice, fue argentina y con Messi.
El nivel de aislamiento era brutal, que su mente, digamos la mente de todos esos presos políticos del Chipote, se quedó con una, con una concepción de lo que pasaba en el mundo. Fue hace 18 meses, como que saltaron ahorita a un mundo nuevo, casi 18 meses después.
Eliezer: Para algunos fue un año y medio de encierro, para otros más de cuatro años. Pero para todos, la situación cambió el miércoles 08 de febrero por la noche.
Wilfredo: Mira, dicen ellos que fue muy rara esa noche porque después de cenar les quitaron los uniformes, le dieron ropa y esa noche dicen en El Chipote no le dieron la orden, duérmanse ya temprano, si que los dejaron ahí, que era la una de la mañana. En la madrugada les llegaba a abrir, a golpear los cerrojos y abrir la celda, y los colocan a todos en un grupo grande, todos juntos, porque ellos nunca, como estaban en aislamiento, nunca los mezclaban. Y de pronto los montan, los montan en dos buses.
Eliezer: Los presos políticos liberados le contaron a Wilfredo el miedo y la paranoia que los acompañó esa madrugada. El bus arrancó y pasó por los juzgados sin detenerse. Así que descartaron que fueran para allá. Después pasaron la casa de los pueblos –un lugar donde el gobierno hace actos — entonces, también eliminaron esa opción. Sólo quedaban dos lugares posibles en el camino. El aeropuerto – opción que veían casi imposible — y la cárcel La Modelo.
Wilfredo: Entonces, ellos comienzan a sudar creyendo que los van a trasladar al sistema penitenciario, pero la cosa se pone peor cuando el bus dobla, entra en el portón de la Fuerza Aérea del Ejército, porque la Fuerza Aérea usa la misma pista del aeropuerto. Entonces, algunos creyeron que los llevaban al ejército, que lo iban a desaparecer o a matar.
Eliezer: El autobús paró en medio de la pista del aeropuerto. A su lado había un avión y un grupo de funcionarios estadounidenses.
Wilfredo: Y entonces un policía, un comisionado, se sube a hacerlo firmar un papel a cada uno diciendo que por su propia voluntad se van para Estados Unidos. Entonces ahí ellos entienden o acarician por primera vez la idea de la libertad. Dicen que en el avión ellos estallan de júbilo y comienzan a gritar su consigna ¿Cuál es la ruta? que se vaya el hijo de puta. Pero ellos se callan porque reaccionan y esto no ha despegado todavía estamos aquí. Y se callan. Y todos empiezan a sudar porque nunca se iban, nunca se iban. Y de pronto cierran la puerta, el avión despega y aquello fue una euforia en el aire de liberación. Comenzaron a gritar, a cantar el himno nacional, a gritar sus consignas, a llorar, a abrazarse. Porque no se lo creían.
Eliezer: El vuelo chárter de Managua a Washington duró aproximadamente 3 horas y media. Y mientras estaban volando sobre algún lugar del Caribe, en Managua estaban sucediendo cosas.
Wilfredo: Primero la justicia Orteguista declara deportación, lo cual es ilógico. No te pueden deportar de tu propio país. Y después la Asamblea Nacional se reúne para modificar el artículo 21 de la Constitución Política, que habla sobre el tema de la nacionalidad, y que declaran que los traidores a la patria, porque ellos tienen ese delito político, serán despojados de su nacionalidad. La Asamblea aprueba la ley y ellos básicamente en ese momento en el aire, sin darse cuenta, quedan como apátridas.
Eliezer: Rosario Murillo, la vicepresidenta de Nicaragua y esposa de Ortega, fue la que contactó a Estados Unidos y acordó la liberación de los 222 presos políticos. Pero, según la investigación de Wilfredo, Murillo ocultó lo que pensaban hacer.
Wilfredo: Es decir, cuando el avión va en el aire, también Estados Unidos se entera que la la treta era declararlos apátridas, incluso a espaldas de ellos. Entonces, bueno, ya están puestos aquí. Porque incluso hasta el día de hoy que estamos haciendo esta entrevista, algunas fuentes nos están diciendo que todos los registros civiles de esas personas están siendo borrados en Nicaragua porque ya no son nacionales del país.
Eliezer: Wao, como si no hubiesen existido nunca ¿no?
Eliezer: Wilfredo. ¿Qué señal le podría estar mandando Ortega con estas liberaciones? ¿Por qué crees que lo hizo justo ahora, en este momento?
Wilfredo: Esa es la gran pregunta que ha surgido en todo esto y hay muchas especulaciones, pero sobre todo también planteamientos. Uno de los planteamientos dice que lo que quiere Daniel Ortega es cerrar completamente el país y que todos los que lo adversan a su régimen, sacarlos para fuera.
Eliezer: Otra de las teorías es que Ortega ya no soporta el aislamiento internacional y que las sanciones impuestas por Estados Unidos lo tienen ahogado.
Wilfredo: Pero creo que él lo que está buscando es forzar una negociación política con Estados Unidos que le permita sobrevivir a él, a su régimen. Están buscando una negociación que les permita mantenerse en el poder a cambio de ceder muchas cosas, o incluso de restituir algunas libertades. Pero, ellos no están pensando en irse del poder. Pero al menos esa es mi opinión.
Eliezer: Desde el domingo los ex presos políticos comenzaron a dejar el hotel que el Departamento de Estado puso a su disposición para recibirlos. Algunos han ido a casas de acogida en diferentes estados del país y otros comenzaron trámites para obtener la nacionalidad española. Una nueva vida empieza, pero no será igual para todos.
Wilfredo: Digamos, los presos de mayor perfil de los líderes políticos que no son, digamos, no tendrán tantos problemas porque quizás tendrán familiares donde pueden irse a vivir. Pero digamos, gente, digamos, de a pie, estudiantes, que eran como 170 presos políticos del sistema penitenciario, eran gente que nunca habían salido de Nicaragua, gente que nunca se había montado un avión y de pronto te sacan de tu país, te expulsan, te quitan la nacionalidad y llegas a otro país donde no conoce absolutamente a nadie y no tener ningún familiar que te dé un techo.
Eliezer: Ahora, bajo este nuevo escenario, Wilfredo cree que la oposición tiene un gran desafío por delante, que supone también un período de madurez política.
Wilfredo: El reto es cómo se articulan y cómo logran, cómo logran ser una oposición no solo desterradas, sino en varios países en España, en Costa Rica, en Estados Unidos. Pero sobre todo, cómo movilizar a la gente que continúa dentro, gente que está llena de terror en Nicaragua, que no puede hablar, que no puede tener ninguna participación política porque sabe que la cárcel está de frente. O sea que el reto es grande.
Eliezer: Antes de cerrar este episodio, volvimos a hablar con Wilfredo. Queríamos saber cómo se sentía después de haber sido despojado de su nacionalidad nicaragüense, y qué significaba para él esta decisión del régimen de Ortega. Esto fue lo que nos dijo:
Wilfredo: Es una decisión que me toma por sorpresa. Es decir, yo soy periodista y hacer periodismo no implica ser un traidor a la patria. Pero yo creo que esta decisión del gobierno Ortega Murillo de declararnos apátridas, traidores a la patria y confiscar nuestros bienes en Nicaragua proviene del odio y la venganza y el fracaso que significó la excarcelación de 222 presos políticos que también fueron desterrados. Fueron desterrados porque ese destierro ha significado un aluvión de satisfacción y alegría para la gente, para Nicaragua y el Gobierno ha tenido una derrota moral que le sale por la culata. Pero yo, lejos de sentirme apátrida con esa declaración que hizo este juez faldero de Daniel Ortega, yo me siento más nica que nunca. Y como canta Luis Enrique, uno de nuestros salseros más connotados del país, vamos a vivir siempre marcados por tres franjas, dos azules y una blanca, que las vamos a seguir reivindicando desde donde estemos.
Inés Renique: Este episodio fue producido por mí, Nausícaa Palomeque y Mariana Zúñiga. Lo editó Eliezer Budasoff. Barbara Medina hizo el fact checking. La mezcla y el diseño de sonido son de Ana Tuirán , con música de ella y Elías González.
Gracias a Tara Neil de NPR por su ayuda en este episodio.
El resto del equipo de El hilo incluye a Silvia Viñas, Daniela Cruzat, Denise Márquez, Samantha Proaño, Paola Alean, Laura Rojas Aponte, Juan David Naranjo Navarro, Elsa Liliana Ulloa y Camilo Jiménez Santofimio. Daniel Alarcón es nuestro director editorial. Carolina Guerrero es la CEO de Radio Ambulante Estudios. Nuestro tema musical lo compuso Pauchi Sasaki.
El hilo es un podcast de Radio Ambulante Estudios y Vice News.
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