Transcripción:

Eliezer Budasoff: A finales de marzo de este año, después del fin de semana más violento del siglo en El Salvador, el gobierno decidió implementar un régimen de excepción. Eso permite que se suspendan ciertos derechos en situaciones extremas. Cómo detener a personas sin una orden judicial.

 

Silvia Viñas: Una de las primeras ciudadanas en sufrir las consecuencias implícitas de este régimen fue Roselia Rivas. Rosalía es cosmetóloga y tiene un salón de belleza pequeño en San Marcos Lempa, un municipio a unos noventa kilómetros al sureste de San Salvador. Ahí también vendía bebidas: gaseosas, agua y cervezas.

 

Jaime Quintanilla: A Roselia la llegaron a intimidar el 26 de marzo, el día que fue más homicida en toda la historia de El Salvador. 

 

Eliezer: Él es Jaime Quintanilla, periodista salvadoreño en La Prensa Gráfica. Jaime entrevistó a Roselia.

 

Jaime: Entonces le llegaron a preguntar si tenía permiso de venta de alcohol y ella les dijo que no… y una policía le dijo con estas palabras “Y así venís pidiendo derechos”.

 

Roselia: Luego se fueron ya yo no hablé, no abrí domingo, lunes, martes, por lo mismo que ya había tenido mucho acoso de ellos… 

 

Silvia: El 29 de marzo volvieron los policías…

 

Jaime: Ella estaba en su casa, estaba tranquila, acababa de hacer limpieza y estaba en una llamada con su esposo. Llegaron los policías y le dijeron que saliera. Ella se acercó al portón y les dijo que, qué deseaban, que porqué la andaban buscando. 

 

Roselia: Vení a abrir, ¿por qué no has abierto?, dices que vendrías aquí abajo, me dice un agente, entonces yo le dije que no, que yo estaba enferma y que no estaba abriendo porque no les podía decir a ellos que por el hostigo de ellos. 

 

Jaime: Y los policías le repitieron que saliera. Al final ella terminó saliendo y se puso su celular en su escote. 

 

Silvia: Y según el testimonio de Roselia, no se dio cuenta que después de colgar con su esposo, su celular empezó a grabar. Y no era un video cualquiera… era un Facebook Live. O sea, todo lo que estaba pasando fue transmitido en vivo. 

 

Audio de archivo, video de Roselia 

 

Roselia: No sé si fue Dios o accidentalmente se grabó el video que sale.

 

Jaime: Y la comenzaron a interrogar, ¿verdad?, que porqué no había abierto, que qué había pasado y les dijo que como no tenía permiso de venta de alcohol decidió no volver a abrir hasta el hasta que lo tramitara.

 

Audio de archivo, video de Roselia 

 

Roselia: Luego me dice la señora vení, salí, soy mujer igual que vos, ¿por qué tenés miedo? Si soy mujer, no tengas miedo. 

 

Audio de archivo, video de Roselia 

 

Roselia: Entonces yo sentí como que ya no era un agente policial que me estaba hablando, sino que era como que era algo en contra de mi persona. Algo personal. 

 

Audio de archivo, video de Roselia 

 

Eliezer: Ahí la situación se puso más tensa. En lo último que se ve de la transmisión en Facebook, los policías están a pocos centímetros de su cara, incluyendo la policía que acaba de mencionar Roselia. 

 

Roselia: Vino ella y me esposó. Cuando me esposó me llevaron la mano hacia atrás, fue cuando ella me dijo… no sé si las palabras las puedo decir.

 

Jaime: Sí.

 

Roselia: Y me dijo zorra. Parecía zorra. Me pegó en la boca y luego me pegó aquí.

 

Jaime: y la tiró al suelo. Vino otra policía, y la agarró del cabello y la comenzó a contaminar contra el suelo. Le restregó la cara en el suelo y se le paró encima.

 

Roselia: Yo gritaba que me estaba ahogando y que por qué me estaban deteniendo. Y le grité a un muchacho que yo lo conozco desde pequeño lo conocíamos de una gente que andaba con ella y le dije yo: Molina, le dije ayúdame. 

 

Silvia: Roselia, además de tener un salón de belleza, es una lideresa comunal. Había trabajado de cerca con los policías de la zona en temas de prevención de violencia.

 

Roselia: ¿Por qué me hacen esto? Si me conoces. Sabes quién soy, le dije. No soy ninguna delincuente.

 

Jaime: Y como es una zona que se suele inundar cuando hay lluvias, también había ayudado con la fuerza de rescate para evacuar personas… no era una persona desconocida. Ahí todos los policías la conocían, toda la gente sabía que ella era una lideresa que ayudaba en esto. 

 

Roselia: Ayúdenme, le dije. No aguanto, ¡me estoy ahogando! le dije. Luego me pararon, me sacaron a la calle. Cuando me sacaron a la calle me pararon detrás del carro de patrulla y me pegó. Me dijo mira, vieja puta me dijo, oye hasta te podemos matar, me dijo. La ley está a favor de nosotros. Hágalo, le dije. Vino la señora, de ahí… mi suegra, ella cuando ya me tenían así, que me estaban golpeando, salió y les dijo: “Dejen de golpearla”, le dijo, “ya la golpearon” y le dijo la agente policial: hasta más le vamos a dar si no hace caso, dijo, donde yo no me le opuse ni nada… 

 

Jaime: Y aun así se la llevaron… ¿Por qué?,  todavía ni ella lo puede decir, porque no lo sabe. 

 

Eliezer: Bienvenidos a El hilo, un podcast de Radio Ambulante Estudios y VICE News. Soy Eliezer Budasoff. 

 

Silvia: Y yo soy Silvia Viñas.

 

Eliezer: El régimen de excepción que empezó a finales de marzo para frenar el aumento de los asesinatos se ha ido extendiendo mes a mes. En principio iba a ser por treinta días, pero el viernes 14 de octubre fue renovado por séptima vez. 

 

Silvia: Hoy, casi siete meses después, El Salvador tiene la tasa de detenidos más alta del mundo y se han reducido drásticamente los homicidios. Pero hay miles de detenciones arbitrarias, denuncias por violaciones a los derechos humanos y decenas de muertos entre los detenidos bajo este régimen ¿Cuáles son las consecuencias de vivir sin derechos fundamentales? 

 

Es 21 de octubre de 2022.

 

Eliezer: Jaime, El Salvador está desde el 27 de marzo bajo régimen de excepción.

 

Audio de archivo, Ernesto Castro, presidente de Asamblea Legislativa: Queda aprobado el proyecto de decreto que contiene régimen de excepción.

 

Audio de archivo, presentador: Tras una petición del presidente Nayib Bukele, la asamblea legislativa de El Salvador aprobó el régimen de excepción por un mes.

 

Eliezer: Recuérdanos brevemente por qué se tomó esta medida.

 

Jaime: En ese momento, Nayib Bukele, el presidente del Salvador, mandó un tuit solicitando esta medida que se implementara porque desde el jueves había habido un repunte de asesinatos. 

 

Audio de archivo, reportero: Jornadas de violencia estremecedoras.

 

Audio de archivo, reportero: El Salvador vivió posiblemente los días más oscuros de los últimos años.

 

Más de ochenta asesinatos en setenta y dos horas.

 

Jaime: El jueves hubo cinco. El viernes hubo catorce. Recuerdo que por la mañana de ese sábado una fuente policial me escribió y me dijo que iban como unos veinte homicidios y ni siquiera era mediodía. Y aparte me dijo que la mayoría eran civiles, que ninguno de los de los muertos estaban identificados como pandilleros.

 

Silvia: Ese sábado el día terminó con sesenta y dos homicidios.

 

Jaime: Y el domingo, que ya estaba activo el régimen de excepción, terminó con once. Es decir, que aunque hubo régimen no se pudo detener la ola inmediatamente. 

 

Eliezer: Ese fue el fin de semana más violento del siglo en El Salvador.

 

Silvia: ¿Y en la práctica qué significa este régimen de excepción?

 

Jaime: Sí, el régimen de excepción en realidad suprime garantías constitucionales. Es el derecho a asociarse libremente, el derecho a la privacidad en la correspondencia, 

 

Eliezer: Y el régimen de excepción permite que detengan a personas sin una orden judicial. Y también amplía el periodo de detención administrativa, es decir, el tiempo que la persona puede estar detenida sin una acusación formal. En El Salvador ese tiempo es de tres días, pero bajo el régimen es hasta quince días. 

 

Silvia: La Constitución permite decretar un régimen de excepción. Luego de un plazo de treinta días se puede prorrogar si la situación por la que se decretó aún no se ha resuelto. Y eso es justamente lo que ha estado haciendo la Asamblea Legislativa…

 

Audio de archivo, presentadora: El gobierno de El Salvador logró que por primera vez por segunda vez se extendiera otro mes el estado de excepción.

 

Audio de archivo, reportero: Ha sido prorrogado mes a mes por el parlamento, controlado por los aliados de Bukele, y continuará al menos… 

 

Silvia: El viernes pasado ¿no?, el 14 de octubre, se extendió ese estado de excepción por séptima vez ¿Qué razones ha dado el Gobierno para seguir prorrogandolo mes tras mes?

 

Jaime: Fíjate que eso es algo que todos, o sea, no entendemos del todo cuál es la lógica del gobierno. Porque se aprobó, claro, con esta gran ola homicida de ochenta y siete homicidios en tres días. Es una calamidad para cualquier país. Pero luego en la prórroga tras prórroga, ellos dicen que si no continúa el régimen de excepción hasta que capturen hasta el último pandillero, las pandillas se pueden volver a reorganizar y volver a tener fuerza. Entonces, ese es el principal argumento que han usado para seguirlo prolongando, a pesar de que la principal razón que eran los homicidios ya lo tienen controlado.

 

Eliezer: Eso es lo que no se entiende. Porque según la constitución, el régimen de excepción se puede extender luego de un plazo de treinta días bajo una condición clave: que la situación que lo motivó aún no se haya resuelto…

 

Silvia: Pero como dice Jaime, la tasa de homicidios ha vuelto a bajar. El mismo gobierno reporta que han regresado los días consecutivos sin un solo asesinato,  algo que había logrado antes de esa ola de violencia en marzo que motivó este régimen de excepción originalmente.

 

Silvia: ¿Y qué consecuencias entonces han tenido estos meses de estado de excepción? 

 

Jaime: Quizás la primera consecuencia es eso, que se ha logrado controlar los homicidios, a pesar de que el gobierno no cuente algunos homicidios, como cuando es un enfrentamiento entre la policía y los pandilleros, que resulta algún pandillero muerto. Ellos ya no cuentan eso como homicidio, a pesar de que antes sí se contaba. Y lo otro es que, es cierto, muchos delitos han disminuido, según cifras oficiales, como la extorsión, los robos también han disminuido. 

 

Al gobierno le gusta también decir que lleva tantas personas detenidas para parecer que toda esta política es bastante buena. Hasta el 14 de octubre iban más de cincuenta y cinco mil detenidos, mil seiscientas armas incautadas, más de dos mil vehículos y doce mil celulares. Lo cual también es un poco raro, porque si hay cincuenta y cinco mil capturados y solo doce mil celulares ¿qué pasó con todos los otros celulares de todos los capturados? Y también la incautación de armas es muy poca, son mil seiscientas armas. Entonces para cincuenta y cinco mil supuestos pandilleros, aunque el gobierno siempre los vende como que condenados que son pandilleros, es un poco sospechoso. A uno le causa un poco de ruido, pero es lo que el gobierno está publicitando como sus logros. Pero también está del otro lado de la moneda. En la práctica el régimen ha servido para poder capturar a cuanta persona vean sospechosa. 

 

Eliezer: El Salvador ya ha superado a Estados Unidos como el país con la tasa más alta de encarcelamiento… Casi el 2% de la población adulta del país está en la cárcel..

 

Jaime: Claro, suponemos que también han capturado a muchísimos pandilleros, que ese es el principal objetivo del régimen. Pero entre esta práctica de capturar a quien vean sospechosos los policías, también se han ido muchísimas personas inocentes. Por ejemplo, hace un mes más o menos, el fiscal general decía que habían sacado a ochocientas tres personas libres porque no les habían encontrado nada. Entonces, desde ahí ya te está diciendo mucho que hay una, que ha habido mucha gente que se ha ido presa siendo inocente.

 

Eliezer: Como Roselia, de quien escuchamos al comienzo de este episodio.

 

Silvia: A Roselia la procesaron por algo que se llama difusión ilegal de información en redes informáticas… o sea, por el video que ella dice que grabó accidentalmente. También por agrupación ilícita, que, como veremos más adelante, es lo que se usa para detener a muchas personas bajo este régimen de excepción. El acta policial dice que también se resistió, algo que, como la escuchamos decir al comienzo, ella niega. 

 

Eliezer: Estuvo detenida por casi dos semanas. Y le cuenta a Jaime que en la cárcel no tenían atención médica. Fue liberada el 12 de abril.

 

Silvia: Pero sigue muy afectada. Sufre secuelas psicológicas por lo que pasó. Le contó a Jaime que le dan ataques de pánico cuando ve pasar una patrulla frente a su casa. 

 

Eliezer: Su hija llevó su caso a la Procuraduría para Defensa de los Derechos Humanos. Ahí le hicieron un peritaje médico, y concluyeron que lo que ella dice sobre su tortura a manos de la policía cuando la detuvieron coincide con las heridas que tenía.

 

Silvia: Su experiencia no es aislada. Después de la pausa, Jaime nos cuenta cómo la fuerza pública está implementando este régimen en las calles y en las cárceles. Ya volvemos.

 

Denise Márquez: Esta semana, el episodio narra las condiciones en las que muchos presos inocentes están siendo capturados por la campaña antipandillas del Gobierno de El Salvador. Pero si necesitas más contexto y quieres saber qué llevó a Nayib Bukele a decretar el estado de excepción, escucha “Aquí se mata cuando ellos quieren: la ola de violencia en El Salvador”, nuestro episodio 102.

 

Y si quieres profundizar aún más en una investigación que revela los pactos entre Gobierno y pandillas, te recomendamos “Los audios que explican la peor matanza del siglo en El Salvador”, el episodio 109. Los encuentras en el hilo.audio o en tu app favorita de podcast.

 

Silvia: Estamos de vuelta en El hilo.

 

Eliezer: Jaime, ¿Cuál ha sido el criterio para las detenciones? O sea ¿a quiénes están deteniendo en general?

 

Jaime: Hablaba con una fuente policial cuando llevaba como un mes y algo el régimen y me explicaba que le habían puesto una cuota de capturas a cada delegación policial. Y también he visto documentos en los que sale ahí, digamos, que la delegación de San Salvador tiene que capturar a cuarenta personas en este día, y ahí se le pone si lo logra o no lo logra. Entonces, según me explicaba este agente policial, al principio no andaban distinguiendo, simplemente capturaban por completar esa cuota, porque si no sus jefes los podían sancionar quitándoles el poco descanso que tenían o mandándolos a otra delegación lejana. También les mandaron un protocolo de actuación en el que decía que tenían que respetar los derechos humanos y actuar correctamente. Eso en la práctica no se cumplió, al menos en los primeros meses para nada que se cumplió, se llevaron a mucha gente que simplemente estaba en las tiendas bebiendo…

 

Silvia: O gente que estaba trabajando. Hay un caso que fue muy criticado en redes sociales. En medio de una redada, militares detuvieron a cuatro jóvenes que trabajaban en un café. Estaban saliendo de trabajar y todavía tenían puestos sus uniformes. 

 

Eliezer: La Fuerza Armada publicó una foto de los jóvenes en su Twitter. Ahí salen de rodillas, sin camiseta. El texto que acompaña a la foto dice que esa madrugada ubicaron a pandilleros y colaboradores que atentan contra la tranquilidad de los habitantes. El café para el que trabajan publicó un comunicado diciendo que fueron detenidos sin ninguna justificación.

 

Silvia: El protocolo que nos mencionaba Jaime tenía una última parte.

 

Jaime: Y al final de este protocolo aparte tenían una plantilla de cómo realizar la ficha de captura. Tenían que poner las generales de cada agente que estaba capturando las generales del capturado y ahí ya les venía escrito que tendría que ser por agrupaciones ilícitas. La agrupación ilícita es prácticamente que perteneces a algún grupo delictivo y estás reunido para planear delinquir. Pero como les decía, mucha gente simplemente estaba reunida afuera de una tienda, bebiendo unas cervezas por la noche y llegaron los policías y se los llevaron los soldados incluso porque también tenemos varios reportes de que los soldados, a pesar de que no es su labor, han detenido a civiles y luego los remiten a la policía, pero son los soldados los que los capturan.

 

Eliezer: Jaime nos contó que además de detenciones como estas, donde policías o soldados están patrullando y arrestan a alguien en la calle, también llegan a la gente de otra forma… 

 

Jaime: La otra manera que hemos visto, que también es bastante recurrente, es que llegan a sus casas y lo capturan, porque el gobierno ha abierto una línea telefónica que es el 123 a través de la cual cualquier persona puede llamar y decir, mi vecino es pandillero. Con esa denuncia llega la policía, toca la puerta y le dice: acompáñanos, vamos a ir a hacerte unas preguntas a la delegación. Esa es una mentira. Le dicen que la acompañen porque ya cuando estén en la delegación le van a hacer el acta de detención y va a quedar ahí.

 

Silvia: Jaime nos explicó que la mayoría de las personas detenidas viven en zonas populares, tienen escasos recursos.

 

Jaime: Entonces que se lleven preso a un familiar significa que una persona ya no puede ir a trabajar y eso tiene un impacto grave en toda la familia. En muchos casos he visto cómo quedan los niños ya sin sus padres. Los niños muchas veces andan preguntando, incluso cuando yo estoy entrevistando a los otros familiares, que dónde está su papá y eso es como que te rompe por dentro porque es gente que realmente no tendría por qué estar presa y dejó a su niño que quizás ya nunca lo va a volver a ver, porque si lo condenan, que es muy probable que vaya a pasar, serían al menos unos treinta años de cárcel por agrupaciones ilícitas. Entonces el cómo se están casi destruyendo en cierta medida algunas familias porque se llevan al padre o al esposo. Eso es como lo más feo que he visto en todo esto. Y también a todas las madres o esposas buscando a sus familiares afuera de los penales.

 

Audio de archivo, familiar de detenido: Ellos me lo trajeron el 5 de mayo, no sé la razón por la cuál, no tengo ninguna información, solo sé que está en este lugar.

 

Audio de archivo, familiar: Yo estoy enferma y, ni modo, me voy a tener que quedar acá con mi hija. Pero yo le pido al señor presidente pues que por favor, verdad, que nos ayude, más con los inocentes.

 

Jaime: Que incluso han soportado lluvia, sol con tal de poder tener al menos la certeza de que está dentro de ese penal. Porque muchas veces el gobierno se tarda mucho en decirles ¡Hey! Aquí está su familiar. Y además de eso no tienen ninguna noticia de sus familiares, no es como que les digan sí, está bien o que los puedan ver siquiera. No hay nada de eso. Ellos están presos, y los familiares tienen que confiar en que están bien. Porque también hay casos, por ejemplo, hay uno de un señor que murió adentro del penal. Como a los familiares nunca le informaron, lo enterraron en una fosa común. Lo tuvieron que ir a sacar de esa fosa común para darle la propia sepultura familiar. Entonces, hasta ese nivel de desinformación hay que los propios familiares ni siquiera saben si su familiar está vivo o ya murió, o qué está pasando con él.

 

Eliezer: Cuando se sabe dónde está presa la persona, Jaime nos contó que en muchos casos los familiares tienen que ir a dejarle un paquete alimenticio que cuesta más de cien dólares.

 

Jaime: porque en las cárceles no los alimentan bien y las tienen que dejar, por ejemplo, suplementos nutricionales como Pediasure para que puedan mantener su salud y todas las medicinas que tienen que darles, ¿verdad?, porque también hay muchos muertos que han salido supuestamente por enfermos o por algo así.

 

Silvia: Jaime nos explica que el gobierno no ha entregado información oficial de los fallecidos. Pero la Prensa Gráfica, el medio para que él trabaja, consiguió cifras de fuentes dentro del Instituto de Medicina Legal. Dicen que son más de setenta fallecidos. 

 

Jaime: La mayoría tienen algo común que la razón de muerte preliminar que le ponen es edema pulmonar, que es algo que es muy raro que tantas personas se mueran por eso en tan poco tiempo. Ahí hay otros casos que sí, el propio Instituto de Medicina Legal, ha reconocido como homicidio. 

 

Silvia: Es el caso de un joven de treinta años que se llamaba Adrián Solórzano… Su muerte fue clasificada como asfixia mecánica, el término que se usa para alguien que puede haber sido ahorcado o sofocado. Adrián, se dedicaba a ofrecer servicio de taxi en su auto personal, o sea, fuera de la asociación de taxis oficiales. 

 

Jaime: Entonces, por eso, en documentos judiciales a los que tuvimos acceso, la policía dijo que en esos viajes aprovechaba para irle a dejar comida a un líder pandillero que estaba en esa zona. Investigando, nos dimos cuenta que ese líder pandillero en realidad tendría que estar preso. Fue capturado en 2019 y se le incautó un fusil AK 47. Entonces, no tendría mucho sentido que le fuera a dejar comida si el supuesto pandillero, el supuesto líder, ya estaba preso.

 

Eliezer: De todos modos, por esa acusación el 18 de abril la policía apareció en la casa de Adrián. 

 

Jaime: Él salió y preguntó qué pasaba. Los policías le dijeron eso de acompáñanos, te vamos a hacer unas preguntas.

 

Silvia: Es importante mencionar que Adrián había votado por Bukele, igual que el resto de su familia… 

 

Jaime: Él incluso había hecho campaña por Nayib Bukele, dijo yo no debo nada, así que no tengo por qué temer que es un mantra que se ha usado mucho el gobierno y sus simpatizantes. 

 

Eliezer: Entonces se fue con los policías. 

 

Jaime: En ese momento quedó detenido. De ahí su mamá y su esposa fueron a la delegación policial a preguntarle por qué lo habían detenido y le dijeron que no, que él iba a quedar detenido y que se fueran, porque si no también les iban a detener a ellos. Se fueron y no supieron mucho más de él, solo fueron a dejar un par de veces más el paquete alimenticio… 

 

Silvia: Y un par de meses después, frente a la casa de la madre de Adrián pasó un auto de una funeraria. Jaime habló con ella…

 

Madre de Adrián: Fíjese que yo acababa de llegar del mercado y me senté. Porque nosotros tenemos una champita y ahí en la calle, ahí me senté. Cuando yo vi un microbús negro que pasó… 

 

Jaime: Ella no se preocupó… 

 

Madre de Adrián: Y se regresó. 

 

Jaime: De ahí vio que estaba retrocediendo y sintió como algo malo adentro dice ella. Entonces, el personal de la funeraria se bajó y le dijo. 

 

Madre de Adrián: ¿Verdad que usted tiene un hijo preso?

 

Jaime: ¿Verdad que usted tiene un hijo preso? Ella dijo que sí, y le dijeron que había muerto. Lo más curioso de esto es que no es el Estado el que está informando quién muere o qué le está pasando a la gente que está dentro, sino que fue una funeraria que se enteró, según nos cuentan, porque en Medicina Legal les comentaron.

 

Eliezer: La hermana de Adrián tuvo que dar un montón de vueltas para encontrar a su hermano. Solo le habían dicho que estaba muerto, pero no dónde estaba su cuerpo.

 

Jaime: Cuando por fin dio en medicina legal, le explicaron eso de que su hermano había muerto por asfixia mecánica y le explicaron que tenía como un moretón de dos centímetros en el cuello. En el que probablemente lo habían asfixiado y ella me contó que irónicamente casi el doctor le dijo quiénes tienen un palo de dos centímetros adentro de una cárcel que son los custodios. Entonces, la sospecha era que algún custodio en alguna riña o en algún desorden se le pasó la mano y lo terminó matando.

 

Madre de Adrián: Mentira. Mi hijo no es peleón. Porque mire… parece broma, pero él a la autoridad nunca le faltó el respeto. A mí me lo mataron…

 

Eliezer: La denuncia de la familia de Adrián es una de las más de tres mil que ha recibido la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos. Estas son cifras de posibles violaciones a los derechos humanos durante el régimen de excepción. Pero el  procurador nunca logró sacar un informe conclusivo, y el mismo día que se extendió el régimen por séptima vez, la Asamblea eligió a su sucesor.

 

Jaime: Entonces, que una institución que está encargada de velar los derechos de todos los salvadoreños no pueda decir si hay violaciones a los derechos humanos en siete meses, es porque no hay mucha esperanza de que pase algo realmente. Uno espera que sí, ¿verdad?, pero hasta el momento no hay, porque también el discurso oficial del presidente va sobre: todos ellos son los malos, son pandilleros. Y los derechos humanos de las personas honradas, que son la gente que está libre para él y que no cometió ningún delito, cuentan más que los de los detenidos, sin pensar que dentro de los detenidos también hay personas que no tenían nada. No tenían por qué estar presas.

 

Silvia: Amnistía Intencional ha estado documentando abusos a derechos humanos durante el régimen de excepción, que van desde violaciones al debido proceso a casos de tortura y miles de detenciones arbitrarias. Otras tres organizaciones denunciaron al Estado salvadoreño frente a la Corte Interamericana de Derechos Humanos por, entre otras cosas, detener a al menos ciento cincuenta y dos personas de forma arbitraria. 

 

También, según un reportaje reciente del medio Dromómanos, la cantidad de salvadoreños pidiendo refugio en México ha dado un salto en los meses de régimen de excepción. Ha aumentado casi 80%. 

 

Eliezer: Lo que nos cuentas es súper grave, ¿no? Pero, ¿qué piensa la gente sobre este estado de excepción?

 

Jaime: Bueno, el régimen de excepción tiene bastante aprobación en todo el país. 

 

Eliezer: Esta semana, una encuesta del Instituto Universitario de Opinión Pública reveló que más del 75% de los salvadoreños aprueban el régimen de excepción. 

 

Silvia: Aún así, hay críticas a la forma en que se están haciendo las cosas. Un ejemplo es que un buen número no está de acuerdo con las capturas sin orden judicial. Pero cuando se trata de extender el régimen de excepción, las opiniones están divididas. 

 

Jaime: Incluso las propias víctimas no lo ven como algo malo. Eso es lo más curioso, que gente que tiene familiares detenidos dicen: Sí, está bien. Que se lleven a todos los pandilleros que limpien el país, pero que no se lleven a los a las personas inocentes. 

 

Eliezer:  Y es que hay que entender el nivel de hastío que sienten los salvadoreños con las pandillas. Es un ciclo que se repite desde hace treinta años, desde que terminó la Guerra civil en el país: gobiernos de derecha y de izquierda, promesas, planes, negociaciones. Y con todo y eso, la violencia sigue. Se convive con ella. Con la extorsión. Afecta cada aspecto de la vida nacional. 

 

Jaime: Las pandillas no son algo que los salvadoreños queremos en realidad. Son grupos que los gobiernos anteriores lograron fortalecer y que ahora están viendo prácticamente que este gobierno hace lo que siempre habían querido, que los capturen a todos y ahí vean a donde los metan, porque eso es al final lo que la gente siempre dice, que no le importa lo que le pase a esas personas. Pero lo que estamos viendo también es que estas políticas son prácticamente repetitivas, siempre. 

 

Eliezer: Y como ha reportado El Faro, incluso se repite la estrategia de negociar con las pandillas. La masacre de ochenta y siete personas ese fin de semana de marzo –lo que motivó el régimen de excepción– fue una respuesta a lo que la MS-13 consideró una traición en el pacto que tenía con el Gobierno de Bukele. Y el gobierno volvió a la misma solución de todos los gobiernos anteriores:

 

Jaime: Es mano dura ¿Y después qué va a pasar? ¿Qué va a pasar con estas cincuenta mil personas que las condenan? ¿Van a pasar presas los treinta años? ¿Y luego qué? Entonces lo que… Pero esto sí es como una opinión bastante mía, porque si el régimen de excepción en diferentes encuestas tenían del 74% hasta el 86% de aprobación, es que el régimen no es malo hasta que no te toca. Mientras tus familiares y todo y toda tu vida siga normal el régimen está bien. Ya cuando te toca cambiar de opinión.

 

Silvia: Bueno, Bukele ya anunció que va a ser candidato en las elecciones presidenciales de 2024…

 

Audio de archivo, Nayib Bukele: Luego de conversarlo con mi esposa Gabriela y mi familia, anuncio al pueblo salvadoreño que he decidido correr como candidato a la presidencia de la República.

 

Silvia: Aunque según la constitución de El Salvador no puede, ¿no? porque prohíbe la reelección inmediata. Pero en este escenario, que ya básicamente es como un escenario electoral, ¿qué crees que va a pasar con el estado de excepción?, o sea ¿qué tiene que pasar para que dejen de renovarlo?

 

Jaime: Creo que tiene que pasar lo que él mismo ha estado diciendo de que hasta que desarticulen todas las pandillas, el estado de excepción va a seguir vigente. Porque es eso: él quiere pintarse como el gran superhéroe, el que va a salvar a todo el país y el que va a solucionar todos los problemas que dejaron los antiguos gobiernos, como a él le gusta decir. Entonces, el Estado de excepción va a seguir mientras él quiera prácticamente. Porque según sus propios números, hay cerca de setenta mil u ochenta mil pandilleros, entonces todo parece indicar que hasta que tenga esa cantidad de capturados, el régimen va a seguir activo. 

 

Silvia: Este episodio fue producido por mí, por Inés Rénique y Daniela Cruzat. Fue editado por Eliezer Budasoff y Daniel Alarcón. Bruno Scelza hizo el fact checking. Y la mezcla y el diseño de sonido son de Elías González, con música de él y Remy Lozano.

 

El resto del equipo de El hilo incluye a Mariana Zuñiga, Denise Márquez, Samantha Proaño, Paola Alean, Laura Rojas Aponte, Elsa Liliana Ulloa y Camilo Jiménez Santofimio. Daniel Alarcón es nuestro director editorial. Carolina Guerrero es la CEO de Radio Ambulante Estudios. Nuestro tema musical lo compuso Pauchi Sasaki. 

 

El hilo es un podcast de Radio Ambulante Estudios y Vice News. 

 

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Gracias por escuchar.